UN CURSO DE MILAGROS
Tu Hijo está a salvo dondequiera que se encuentre porque Tú estás allí con él. Sólo con que invoque Tu Nombre recordará su seguridad y Tu Amor, pues éstos son uno.¿Cómo puede temer, dudar o no darse cuenta de que es imposible que pueda sufrir, estar en peligro o ser infeliz cuando él te pertenece a ti, es bienamado y amoroso, y está por siempre a salvo en Tu Paternal abrazo?
Y ahí es en verdad donde nos encontramos.
No hay tormenta que pueda venir a azotar el santuario de nuestro hogar. En Dios estamos a salvo, pues, ¿qué podría suponer una amenaza para Dios, o venir a asustar a lo que por siempre ha de ser parte de Él?
LO SIENTO, por las memorias de dolor que comparto contigo,
TE PIDO PERDÓN por unir mi camino al tuyo para sanar,
TE DOY LAS GRACIAS porque estás aquí para mí y
TE AMO por ser quien eres.
AQUIETA TU MENTE Y AHI ENCONTRARAS A TU DIOS