Cuando ya no estabas.
Mi corazón lloro en su interior
Culpando a ese beso emblanquecido
Ese beso que te di cuando tu cuerpo se ponía frio
Odie al sol y las estrellas
Acusando a cada ser que habita esta tierra
Es que tú no debías partir
Dejando nudos en mis venas.
Que fue de esos años célibes
En esos que yo cogía tus manos
Cuando te decía como se debe ser buen ser humano.
Chiquita mía lloro tu presencia ausente
Mientras mi boca se reseca
Y mis parpados se caen de pena.
¡Hooooo! que dolor siento hoy
Que frio día y tu tan chiquita en un cajón
Pero ya no, es que si tú no estás yo no quiero estar
Me regalaste solo ocho años
Me regalaste una eternidad
Por eso tomare el veneno
Para buscarte en el infinito
Y quizás encontrarte en el más allá.
En ese instante abrase el sol y las estrellas
Sentí tu presencia en mi zozobra.
WINCENT CID
El escritor que no sabe escribir
Solo un soñador de sueños