AUSENCIA
En la ribera de azules y naranjas... al despuntar la tarde.
Jugamos con imágenes
la simple coincidencia
de los sueños.
Tu palabra diseñó los pasos para desnudarme.
Sentiendo tus manos
dibujando el contorno
de mi espalda.
Con palabras susurrantes me pediste que te amara.
Senti mi cuerpo
cubierto de azucenas
al reclinarnos los dos.
¡Y jamás imaginé amar tanto!
Se dibujo el anhelo
y la añoranza
Y desdibujaron.
El dolor afloró...
piedras nacieron
en el camino.
Se puso cilicio
a la quimera
y dulce amargor
a la mistificada unión.
|