Déjame que te busque, cuando despierte el alba, que te imagine todo con tu piel encantada que vienes a mi encuentro con tus manos al viento una sonrisa dulce y amor en tu mirada. Y cuando el sol asome pasando el horizonte, cuando las sombras se pierdan, la mañana será mas clara entonces he de susurrarte las palabras más hermosas, las más perfumadas, y mis manos serán de seda, y atravesando tu sueño, alcanzarán tu alma para que siempre lleguen cuando despierte el alba.
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