JULIO VERNE (2)
Julio Verne
TODAS SUS NOVELAS
Era corriente que las novelas se publicaran en los periódicos. Era
habitual que en base a entregas por fascículos, los lectores pudieran
seguir el desarrollo de una larga historia. Así comenzó a publicar un
1 de enero de 1874 en el "Magazin", "La Isla Misteriosa" y, mucho
antes, en 1965, en el diario "Journal des Débats", "De la Tierra a la
Luna". Incluso, sobre esta obra, se cuenta que en el diario se recibieron cientos de cartas de los lectores solicitando instrucciones
para conseguir una plaza en el obús que debería subir hasta alcanzar
la luna, según la ficción de Verne.
En sus comienzos, escribió varias tragedias para el teatro y, posterior-
mente, un libreto para un músico, vecino suyo. Se graduó de Derecho
y Leyes por imperativo paterno, algo que fue contra su voluntad y
carrera que jamás ejerció. Había elegido el camino de la literatura, algo
poco comprensible para la mentalidad del padre que pretendía tuviera
una profesión segura que le proporcionara ingresos estables.
Su actividad narrativa fue frenética, llegó a publicar 64 grandes novelas, empujado por su editor y ppor lo que la época demandaba:
escritos ideados para los más jóvenes. Cada año sorprendía con más
de una obra nueva que asombraba tanto como las anteriores: dar la vuelta en 80 días, leer las stribulaciones de un chino en China, recorrer
20.000 leguas de viaje submarino, acompañar las aventuras de tres
rusos y de tres ingleses o acompañar al correo del Zar y, así, un largo
etcétera. Además de correr aventuras imposibles de olvidar con
Miguel Strogoff o con los hijos del Capitán Grant.
En su vida privada, sufrió el atentado de uno de sus sobrinos, al parecer desequilibrado, que disparó contra Verne y lo que, si bien no
acabó con su vida, le ocasionó una salud minada y quebradiza. Uno
de los disparos le alcanzó la pierna y los daños fueron considerables,
hasta arrastrar el dolor para siempre.
Fue acusado de plagio por "Viaje al Centro de la Tierra", pero pudo
demostrar que la escritura de la obra era anterior a la obra "La Cabeza
de Minerva" de Delmas, un autor cuya novela no ha trascendido en el
tiempo.
VERNE NOS PROPONE UN JUEGO
Fue tan dado al misterior y al estudio de la matemática que ideó una
especie de mensaje en su epitafio, escrito sobre su tumba se podía
leer, de forma resumida, lo siguiente: "Hacia la inmortalidad y la eterna
juventud mandé construir mi tumba (...) En su eslabón está el camino
que conduce a la inmortalidad, a través del secreto de la eterna juventud. El número de los días que excederán a los millares de los
días de mi vida, será el de las centenas de los días de mi muerte. El
número de los días que excederán al de las centenas de los días de mi
muerte, será el de los millares de los días de mi vida. El número de los
días de mi vida y el número de los días de mi muerte tendrán, como
veréis, el mismo número secreto".
Verne con esta adivinanza -casi un trabalenguas-, pretendía retar a su
público futuro a que desentrañara un acertijo que resulta ser más un
vaticinio que otra cosa y que estimula al lector hacia el milagro de la
eternidad. Al final, cabe la posibilidad de preguntarse si lo que Verne
poseía era una forma de arte adivinatorio o que, ciertamente, era capaz
de explicar de algún modo cierto todo lo que rodea nuestro mundo.
Autor: José Carlos Bermejo
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MACHI V