Esta exposición ha recorrido todo el mundo: Rusia, Estados Unidos, América Latina, Australia y países asiáticos como Filipinas, Vietnam, Corea, Sri Lanka, India, además de países de Oriente Medio, África y Europa.
Para su elaboración, el joven beato italiano conocido como el “ciberapóstol de la eucaristía” por sus precoces conocimientos de informática y su empleo para evangelizar, tuvo que hacer varios viajes en compañía de sus padres para documentarse y fotografiar los lugares, sobre todo en Europa.
Carlo Acutis, beatificado en Asís el pasado 10 de octubre, falleció de leucemia en 2006 cuando tenía 15 años. Un año antes, cuando se encontraba de viaje junto con su familia al Santuario de Fátima, en Portugal, se detuvo brevemente en la histórica ciudad española de Toledo.
Carlo, como buen amante de la Eucaristía, conocía la devoción eucarística de Toledo y la tradicional procesión de la solemnidad del Corpus Christi, en que toda la ciudad se engalana para recibir al Santísimo en la custodia.
Fue precisamente al contemplar la impresionante custodia de oro de la Catedral de Toledo cuando, según relata su madre, Antonia Salzano, Carlo exclamó: “Gesù non merita di meno!”, es decir, “¡Jesús no se merece menos!”.
La Custodia de la Catedral de Toledo es obra del artesano alemán Enrique de Arfe, quien la elaboró entre 1515 y 1523 por encargo del Cabildo catedralicio para albergar el ostensorio de oro de la reina Isabel la católica.