Lo inefable
Yo muero extrañamente... no me mata la vida, no me mata la muerte, no me mata el amor; muero de un pensamiento mudo como una herida... ¿No habéis sentido nunca el extraño dolor de un pensamiento inmenso que se arraiga en la vida, devorando alma y carne, y no alcanza a dar flor? ¿Nunca llevasteis dentro una estrella dormida que os abrasaba enteros y no daba un fulgor?
¡Cumbre de los martirios...! ¡Llevar eternamente, desgarradora y árida, la trágica simiente clavada en las entrañas como un diente feroz!
Pero arrancarla un día en una flor que abriera ¡milagrosa, inolvidable!... ¡Ah, más grande no fuera tener entre las manos la cabeza de Dios!
Delmira Agustini
Reseña biográfica Poeta uruguaya nacida en Montevideo en 1886, en el seno de una familia burguesa descendiente de alemanes, franceses y porteños. Desde muy corta edad incursionó en el campo poético publicando su primer poemario, El libro blanco en 1907. Luego aparecieron Cantos de la mañana en 1910 y Los cálices vacíos. Mujer de gran sensibilidad y sensualismo, asombró a Montevideo y Buenos Aires con sus libros de versos. Contrajo matrimonio en 1913. Su matrimonio fracasó a los dos meses, y un año después, en 1914, murió asesinada por su marido quien se suicidó después. Después de su muerte se publicaron dos composiciones más: El rosario de Eros y La alborada.
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