Tules blancos en la mañana;
unen la noche, al alba clara;
cierran las oscuridades;
untan de rocio las caras.
Lunas ya acostadas;
irisan el cielo las nubes;
tonos acaramelados de;
otoños, que con los años suben.
Mareas de aguas azules;
embelezan la paz de las almas;
entretienen, a las caracolas;
nacidas en los fondos de la calma.
Luces de brumas de olas;
oteando el horizonte cercano;
quiebras en la cresta que alto asoma;
únicas en el profundo mar océano.
Esta es la naturaleza viva;
carentes de penas y llantos;
esta es la mañana que anima;
cual pajaro canta en los campos.
Es la cercania al encuentro;
lo que me produce la alegria;
de ver como tomo tu mano.
y como nos vá acercando el día.
Cádiz a 17 de septiembre de 2012
Domingo Ouviña San Isidro.@
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