Del salmo 78, 1-2. 3-5. 8. 9.
R/. Socórrenos, Dios, salvador nuestro.
Dios mío, los paganos han invadido
tu propiedad,han profanado tu santo templo
y han convertido a Jerusalén en ruinas. R/.
Han echado los cadáveres de tus siervos
a las aves de rapiña, y la carne de tus fieles,
a los animales feroces. R/.
Hemos sido el escarnio de nuestros vecinos,
la irrisión y la burla de los que nos rodean.
¿Hasta cuándo, Señor, vas a estar enojado
y va a arder como fuego tu ira? R/.
No recuerdes, Señor, contra nosotros
las culpas de nuestros padres.
Que tu amor venga pronto a socorrernos,
porque estamos totalmente abatidos. R/.
Para que sepan quién eres, socórrenos,
Dios y salvador nuestro.
Para que sepan quién eres, sálvanos
y perdona nuestros pecados. R/.