La
sociedad médica asegura que un accidente cerebrovascular, tratado
urgente y adecuadamente, debería dejar mínimas consecuencias. Algunos
ejemplos famosos de stroke son los que sufrieron Sharon Stone y Sarita Salazar -la esposa del cantante mexicano José José-, en ambos casos fueron atendidas a tiempo. Mientras que en el caso de la sexóloga Anabel Ochoa, no logró sobrevivir al derrame cerebral y falleció a los 53 años.
Casos diferentes
Después de experimentar un agobiante
dolor de cabeza, la actriz Sharon Stone instintivamente acudió al
hospital de emergencia, donde le detectaron una hemorragia subaracnoidea
cerebral (SAH) - una hemorragia entre su cerebro y la membrana media
que cubre el misma-.
En el caso de la esposa de José José,
Sarita también respondió bien a la cirugía que se le realizó. La pareja
se encontraba en espera de tomar un vuelo, por lo que José José
manifestó: "Yo creo que si hubiéramos tomado el vuelo, no sé qué habría
pasado".El “Príncipe de la Canción” detalló que 'Sarita' no habla, pues
está entubada y con respirador, pero sí oye y se encuentra en
recuperación.
Pero lamentablemente la situación de Anabel Ochoa
fue otra. Internada por un derrame cerebral, la también psicoanalista,
ya no se pudo recuperar y perdió la batalla a los tres días de caer en
coma.
Qué es un accidente cerebrovascular
El cerebro como cualquier órgano del cuerpo humano necesita del
suministro de sangre que transporte los nutrientes y el oxígeno necesarios para realizar su función.
Cuando
una parte del cerebro es afectada porque no recibe la sangre
suficiente, se producen manifestaciones en el cuerpo que pueden ser tan
severas como una parálisis total o ser imperceptibles, o sea, que no son
notadas por el paciente.
Algunas áreas del cerebro son las
encargadas, por ejemplo, del movimiento de los músculos, de hablar, de
ver o de oír. Todas las funciones de nuestro cuerpo tienen un comando
central en el cerebro que organiza y coordina esas funciones.
Si un área específica esta alterada, la manifestación obviamente va hacer una alteración en la función que ella coordina.
La
sangre llega al cerebro desde el corazón a través de arterias, estas
arterias no son distintas a las arterias de cualquier otro lugar del
cuerpo y pueden sufrir las mismas enfermedades que ocurren en las
arterias periféricas, como por ejemplo; arteriosclerosis,
engrosamientos, formación de ateromas, inflamaciones, desarrollos
anormales y formación de aneurismas (dilataciones de las arterias) o
tumores.