LA MONTAÑA Y EL ABISMO
Le dijo una vez la montaña al abismo:
"Yo, desde mis majestuosas cumbres tengo al mundo a mis pies. Contemplo los más bellos amaneceres y los más esplendorosos crepúsculos. La luz de la luna acaricia mi cuerpo y me siento parte de las estrellas porque casi puedo tocarlas. Es tan grande mi presencia que casi puedo sentir que toco a DIOS".
Y tú, insignificante abismo... ¿Qué haces allá abajo?
Y el abismo le contestó:
"YO SOY QUIEN TE SOSTENGO".
Sin la existencia de la piedra más pequeña, no se formaría la playa. Sin la existencia de un hilo, una alfombra no tendría tanta belleza y sin la existencia de la gota de agua, el océano no tendría su inmensidad.
Piensa... Toda la existencia y todos los seres somos indispensables y nadie está por encima de nadie.
~ Anónimo ~