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| De: Tatisverde (Mensaje original) |
Enviado: 04/02/2012 00:37 |
Orden divino
El orden divino se establece en mí y en mi vida.
Al pensar en el orden, me maravillo en la naturaleza. Los árboles desnudos del invierno siguen su patrón interno para convertirse en un follaje verde en la primavera. Las aves siguen su brújula interna para hacer su migración anual. El sol sale cada mañana en el este y se pone en el oeste.
Soy parte del orden de la vida y estoy inmerso en él. Mi respiración es ordenada y rítmica, como lo es el latido de mi corazón; ninguno de los dos requiere mi control ni dirección. Descanso en el fluir del orden divino y permito que Dios se exprese en mí y por medio de mí, guiando mi desenvolvimiento. Con cada día, el orden divino se manifiesta en todo lo que pienso, digo y hago; y siento gratitud.
Hizo la luna para los tiempos; el sol conoce su ocaso.--Salmo 104:19
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Santuario
Estoy seguro y protegido en el santuario de Dios.
Jesús nos recordó la importancia de tener un santuario --un lugar adonde estar a solas. Él a menudo se aisló para pasar un rato a solas con Dios y para descansar y orar.
En el ajetreo de mi vida diaria, yo también necesito un lugar que pueda llamar mi santuario, un lugar donde me sienta seguro y protegido, donde pueda descansar, rejuvenecerme y vincularme de nuevo con el Espíritu.
Mi santuario puede ser un espacio físico, tal como una habitación especial en mi casa, una iglesia, o un parque. O mi santuario puede ser un estado mental y de corazón. En mi santuario, pongo mis sentimientos y preocupaciones más íntimas en manos de Dios. Visito mi santuario a menudo, y descanso en el amor, la seguridad y el apoyo de Dios.
El les dijo: "Venid vosotros aparte a un lugar desierto, y descansad un poco."--Marcos 6:31
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De: TATIS-7 |
Enviado: 27/02/2012 05:25 |
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Liberar
Uno con el Espíritu y con toda la creación, soy libre.
Soy libre --una creación amada de Dios con la habilidad de elegir mi rumbo. Si las circunstancias externas o los deseos internos parecen retrasarme, me dirijo al espíritu de Dios, mi guía y compañero constantes.
Se ha dicho: "Si quieres algo, libéralo". Me amo lo suficiente para liberar cualquier concepto que deba cambiar o cualquier acción que haya debido ser diferente en el pasado. Me comprometo a tomar decisiones nuevas y mejores en el presente. Con amor, libero mi potencial divino.
La práctica de soltar mi apego al pasado me libera y libera a otros de cualquier sentimiento de culpa o vergüenza. Como creación amada del Espíritu, soy libre, soy capaz e ilimitado.
Me ha enviado ... a pregonar libertad a los cautivos ... a poner en libertad a los oprimidos.--Lucas 4:18
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Afirmar
Afirmo la presencia de Dios manifestada.
Cada uno de nosotros tiene el poder dado por Dios de crear. Utilizamos este poder consciente o inconscientemente cada día. Nuestros pensamientos, palabras y acciones afirman constantemente nuevos resultados. De nosotros depende afirmar Verdad y abundancia, amor y gozo, sabiduría y salud —o la falta de ellos.
Hoy elijo afirmar la bondad y la abundancia de Dios en toda área de mi vida. Afirmo salud; me paro firme y respiro profundamente. Afirmo la plena satisfacción de todo lo que pudiera necesitar. Afirmo el desarrollo de mis talentos y habilidades, mayores oportunidades, armonía y orden en todos los asuntos. Afirmo la presencia de Dios manifestada.
Retén la forma de las sanas palabras que de mí oíste, en la fe y amor que es en Cristo Jesús.—2 Timoteo 1:13
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