|
De: Tatisverde (Mensaje original) |
Enviado: 17/08/2012 15:27 |
Conciencia
Estoy consciente de Dios en toda vida.
Cuando niño, mi conciencia aumentaba según aprendía a caminar, a hablar y a leer. Hoy, mi conciencia continúa creciendo. Inclusive como una persona adulta con una vida de experiencias, puedo aprender algo nuevo.
Aprendo a encontrar exactamente lo que busco. Hoy, mi cometido es buscar a Dios y apreciar a mi Creador en todo a mi alrededor.
Puedo ver a Dios en la belleza de un amanecer; puedo experimentarlo en el amor que siento por mis familiares y amigos. Lo percibo en la creatividad de un artista y lo escucho en la risa de los niños que juegan. Gracias a mi conciencia espiritual, respiro profundamente, ¡y veo a Dios en todo!
El espíritu del hombre es la lámpara del Señor que escudriña los sentimientos más profundos.—Proverbios 20:27
| |
| |
|
|
Primer
Anterior
2 a 3 de 3
Siguiente
Último
|
|
De: TATIS-7 |
Enviado: 20/08/2012 15:37 |
-
Inspirado
Soy inspirado a expresar amor y compasión.
Cuando soy inspirado, soy motivado a tomar acción. Puede que admire a muchas personas, mas si alguien me inspira verdaderamente, su ejemplo me lleva a proseguir de maneras que tal vez no haya considerado antes. Las acciones sabias y amorosas de Jesús me alientan a salir de mi zona de comodidad y marcar la pauta.
Jesús levantó a quienes se sentían oprimidos y sin poder. Él ayudó y compartió generosamente sin hacer distinción de raza, religión o clase social. Hoy me siento inspirado a animar a otros ofreciéndoles mi apoyo. Comparto de mi talento y tesoro, soy un canal abierto para el fluir de la abundancia de Dios. Mis acciones marcan la pauta.
Pongan en práctica la palabra, y no se limiten sólo a oírla, pues se estarán engañando ustedes mismos.—Santiago 1:22 | |
| | |
|
|
|
De: TATIS-7 |
Enviado: 26/08/2012 03:45 |
Prosperidad
Todo bien proviene de Dios, y estoy listo para recibirlo.
Balancear mi chequera es una buena manera de ver si mis gastos exceden mis ingresos. De ser así, mis adquisiciones están fuera de balance y necesito reevaluar mis gastos. Tengo presente que las cosas materiales no ofrecen satisfacción duradera. Al valorar lo que verdaderamente es importante para mí, vivo una vida llena de satisfacción ahora. Todo el bien que deseo proviene de Dios, y estoy dispuesto a recibirlo.
Doy gracias por el amor que doy y que recibo. Mi familia, amigos y mascotas son invaluables regalos de Dios. Dios satisface cada una de mis necesidades. Prospero al mantener esta verdad en mi mente y corazón. Dios provee mayor bien para mí que el que puedo imaginar.
Porque todo aquel que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá.—Mateo 7:8
| |
| |
|
|
|
|