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De: TATIS-7 (Mensaje original) |
Enviado: 13/05/2016 00:10 |
Por esa puerta huyó diciendo«¡nunca!» Por esa puerta ha de volver un día ... Al cerrar esa puerta dejo trunca la hebra de oro de la esperanza mía. Por esa puerta ha de volver un día.
Cada vez que el impulso de la brisa, como una mano débil indecisa, levemente sacude la vidriera, palpita más aprisa, más aprisa, mi corazón cobarde que la espera.
Desde mi mesa de trabajo veo la puerta con que sueñan mis antojos y acecha agazapando mi deseo en el trémulo fondo de mis ojos.
¿Por cuánto tiempo, solitario, esquivo, he de aguardar con la mirada incierta a que Dios me devuelva compasivo a la mujer que huyó por esa puerta?
¿Cuándo habrán de temblar esos cristales empujados por sus manos ducales, y, con su beso ha de llegar a ellas, cual me llega en las noches invernales el ósculo piadoso de una estrella? ¡Oh Señor!, ya la pálida está alerta; ¡oh Señor, cae la tarde ya en mi vía y se congela mi esperanza yerta! ¡Oh, Señor, haz que se abra al fin la puerta y entre por ella la adorada mía!... ¡Por esa puerta ha de volver un día!.
AMADO NERVO
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De: GOREMME |
Enviado: 15/05/2016 07:47 |
Vamos a ponerle una presentacion.........aunque solo sea por eso.........no esperes que muchos mas lo vayan a leer
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Por esa puerta huyó diciendo«¡nunca!» Por esa puerta ha de volver un día ... Al cerrar esa puerta dejo trunca la hebra de oro de la esperanza mía. Por esa puerta ha de volver un día.
Cada vez que el impulso de la brisa, como una mano débil indecisa, levemente sacude la vidriera, palpita más aprisa, más aprisa, mi corazón cobarde que la espera.
Desde mi mesa de trabajo veo la puerta con que sueñan mis antojos y acecha agazapando mi deseo en el trémulo fondo de mis ojos.
¿Por cuánto tiempo, solitario, esquivo, he de aguardar con la mirada incierta a que Dios me devuelva compasivo a la mujer que huyó por esa puerta?
¿Cuándo habrán de temblar esos cristales empujados por sus manos ducales, y, con su beso ha de llegar a ellas, cual me llega en las noches invernales el ósculo piadoso de una estrella? ¡Oh Señor!, ya la pálida está alerta; ¡oh Señor, cae la tarde ya en mi vía y se congela mi esperanza yerta! ¡Oh, Señor, haz que se abra al fin la puerta y entre por ella la adorada mía!... ¡Por esa puerta ha de volver un día!.
AMADO NERVO
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De: TATIS-7 |
Enviado: 25/05/2016 20:34 |
GRACIASSSSSSSSSSSSSS, QUEDÓ HERMOSO.
¿SABES?, TENGO UNA SITUACIÓN CON LOS HERMOSOS FONDOS QUE
NOS HAS OBSEQUIADO. POR MÁS QUE HE INTENTADO NO HE PODIDO
ESCRIBIR EN ELLOS, CUANDO LO HAGO SE BORRA LA IMAGEN O
QUEDA DISTORCIONADA.
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