La palabra ADVIENTO es de origen latín y quiere decir VENIDA.
Es el tiempo en que los cristianos nos preparamos para la venida de Jesucristo.
El tiempo de adviento abarca cuatro semanas antes de Navidad.
Una costumbre significativa y de gran ayuda para vivir este tiempo
es La corona o guirnalda de Adviento, es el primer anuncio de Navidad.
Origen: La corona de adviento encuentra sus raíces
en las costumbres pre-cristianas de los germanos (Alemania).
Durante el frío y la oscuridad de diciembre,
colectaban coronas de ramas verdes y encendían fuegos
como señal de esperanza en la venida de la primavera.
Pero la corona de adviento no representa una concesión al paganismo
sino, al contrario, es un ejemplo de la cristianización de la cultura.
Lo viejo ahora toma un nuevo y pleno contenido en Cristo.
El vino para hacer todas las cosas nuevas.
La corona de adviento encierra varios simbolismos:
La forma circular:
El círculo no tiene principio ni fin,Es señal del amor de Dios que es eterno, sin principio y sin fin, y también de nuestro amor a Dios y al prójimo que nunca debe de terminar.
Las ramas verdes:
Verde es el color de esperanza y vida, Dios quiere que esperemos su gracia, el perdón de los pecados y la gloria eterna al final de nuestras vidas.
El anhelo más importante en nuestras vidas debe ser llegar a una unión más estrecha con Dios, nuestro Padre.
Las cuatro velas:
Nos hacen pensar en la obscuridad provocada por el pecado que ciega al hombre y lo aleja de Dios. Después de la primera caída del hombre, Dios fue dando poco a poco una esperanza de salvación que iluminó todo el universo como las velas la corona. Así como las tinieblas se disipan con cada vela que encendemos, los siglos se fueron iluminando con la cada vez más cercana llegada de Cristo a nuestro mundo. Son cuatro velas las que se ponen en la corona y se prenden de una en una durante los cuatro domingos de adviento al hacer la oración en familia.
Las manzanas rojas que adornan la corona:
Representan los frutos del jardín del Edén con Adán y Eva que trajeron el pecado al mundo pero recibieron también la promesa del Salvador Universal.
El listón rojo:
Representa nuestro amor a Dios y el amor de Dios que nos envuelve.
(Texto de la Red)
Señor Dios, bendice con tu poder nuestra corona de adviento para que, al encenderla, despierte en nosotros el deseo de esperar la venida de Cristo practicando las buenas obras, y para que así, cuando Él llegue, seamos admitidos al Reino de los Cielos.
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