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Vas muy rapido -Debe de estar loco- dijo el conductor mientras pisaba el freno provocando un fuerte chillido y dejando dos largas marcas negras en el pavimento, logrando así detener el auto antes de chocarse con esa persona.
Muy enojado, se baja del auto y, estrellando la puerta, se dirige hacia el hombre y le dice: -¿Acaso no tienes ojos? ? ¿No ves lo peligrosa que es esta carretera y te atraviesas en ella como si nada? ¿O acaso estas loco para no ver el peligro que corres?
-No, no estoy loco -le contestó el individuo-. Lo que pasa es que el puente que esta en la próxima curva acaba de desplomarse; y sabía que, si no hacía algo como lo que hice, tu, en este momento, ya estarías muerto.
Quizás, en la carretera de tu vida, alguna persona "loca" te ha obstaculizado el paso para contarte lo maravilloso que puede ser llorar al ver un atardecer... para hablarte de lo mucho que podemos crecer cuando posponemos nuestras tareas y jugamos alegremente con nuestros hijos, para decirte que los "viejos" son maestros que nos enseñan sobre la paciencia, para hacerte escuchar, al inicio de un nuevo día, el canto de los pájaros saludando a nuestro padre, el sol, etc., etc., y te has enojado sobremanera porque VAS MUY RAPIDO, porque siempre estás muy apurado como para poder prestar atención a esas "nimiedades".
Muchos de nosotros nos afanamos en "ganarnos la vida" y quizás lo que estamos haciendo es gastar nuestra vida ¿No sería bueno encontrar la manera de poder VIVIR la vida, de poder disfrutarla plenamente?
- Se que el paraíso está al alcance de la mano, detrás de esa puerta, en el cuarto de al lado -dijo fulano- pero he perdido la llave.
- Tal vez si desaceleras tu ritmo y te tomas el tiempo necesario para buscarla, la encuentres... -contestó mengano-.
"Hay un paraíso, desde luego, y consiste en llevar tu ganado a los verdes pastos, y en llevar a tu hijo a la cama, y en escribir la última línea de tu poema."
Un abrazo tranquilo
1Juan 4:16 (RVA) Y nosotros hemos conocido y creído el amor que Dios tiene para con nosotros. Dios es amor. Y el que permanece en el amor permanece en Dios, y Dios permanece en él.
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