Sanidad Integral

Salud Integral
Pastora Ruth de Solís

“Con sabiduría se edifica una familia y con prudencia se consolida” Proverbios 24:3 (N.V.I.)

Este artículo va enfocado a valorar la salud integral, específicamente a nivel emocional; ya que las personas con una “enfermedad, una dolencia” en el alma, la llegan a sintomatizar o evidenciar en su salud física en la mayoría de los casos.

El ser humano debe tener como una de sus metas vivir, disfrutando de una Salud Integral.

Cuántas personas invierten en médicos, vitaminas, aspectos muy importantes, por cierto, pero descuidan su interior y son personas con cuerpos que rebozan salud, pero una salud temporal; y dentro contienen una persona enferma de amargura, complejos, rencores y muchas otros aspectos que lesionan su ser, las relaciones con otros, afectan su desempeño laboral, académico y a su familia.

En un momento dado aún su cuerpo es afectado en forma drástica por la carga emocional. ¿Por qué sucede eso? Se preguntará usted, si conocen de Dios; pero sabe hay áreas que cerramos aún a Dios.

Hoy quiero invitarle para que inicie un paseo a su ser interior con el fin de ir conociendo y sacando de usted todo aquello enfermizo, patológico. Y pueda usted decir usted un día, como enseña Juan 10:10 “Yo tengo vida y vida en abundancia” Su familia merece que usted este sano, usted lo merece.

Toda situación traumática que no se ha resuelto, aunque parezca dormida será como una sombra que empañará su vida y en el momento menos esperado, saldrá a flote. Además recuerde toda enfermedad se evidencia con síntomas. Aún en etapas de latencia las enfermedades emocionales manifiestan su presencia de la peor manera.

Dios nos ofrece la posibilidad de vivir en sanidad interior, salir de esa cárcel emocional, sanar ese quebrantamiento del alma. Al exponernos al poder sanador de Dios se inicia un proceso, una huída a la Salud Integral.

Este proceso es diferente de una persona a otra pero todos podemos llegar a la meta de restauración. Dios no hace acepción de personas y su voluntad es que vivamos en salud. Dios nos hizo seres emocionales, puso emociones para que disfrutáramos la vida, riéramos, lloraremos, diéramos la respuesta correcta a nivel emocional y viviéramos sin enfermarnos internamente.

Cito los siguientes versículos que señalan la misión de Jesús a favor de su pueblo:
“El Espí¬ritu del Señor está sobre mí¬, por cuanto me ha ungido para anunciar buenas nuevas a los pobres. Me ha enviado a proclamar libertad a los cautivos y dar vista a los ciegos, a poner en libertad a los oprimidos, a pregonar el año del favor del Señor.” Lucas 4:18-21

Jesús dijo que Él vino a libertar cautivos y sanar a los quebrantados. A dar salud espiritual y emocional a través de su sangre Él pagó el precio, usted como hijo tiene derecho a disfrutar su vida, su familia con una salud integral.

Dios creó al ser humano con Necesidades Básicas, desde que estamos en el vientre de nuestra madre, tenemos necesidades que deben ser satisfechas y si no lo son creceremos con un vacío en una área de nuestra vida.

Este aspecto se activará y quizás reaccionemos en forma inadecuada ante un problema, por que aún de adulto buscaremos llenar esa necesidad. Por eso tenemos personas llamando la atención y adultos comportándose como niños porque se sienten rechazados, por el rechazo no sanado desde su niñez.

El ser humano debe recibir la satisfacción de esas necesidades durante la niñez sino le repito quedará una carencia que afectará la calidad de su vida actual y quizá físicamente sea una persona sana pero no gozar de salud integral. En este artículo le comparto tres de esas necesidades, en el próximo escribiré sobre las demás necesidades básicas del ser humano.

1. Amor incondicional: Un niño requiere saber, sentir que a pesar de cualquier error que cometa, aún de una mala nota, de haber quebrado el jarrón favorito de su mamá, le aman y ese amor no cambiará a pesar de que falle. De adulto podrá amar incondicionalmente y sobre todo disfrutar de un Dios Padre que le ofrece amor incondicional.

2. Perdón, ante sus errores: Un niño requiere saber que cuando se equivoque le ofrecerán perdón y la factura no se le cobrará más. Esto le capacitará para perdonar a otros y aceptar el perdón que otros le ofrecen. Hay personas que se refugian en el perfeccionismo porque de niños no se le perdonaron sus errores.

3. Protección, debe sentirse guardado: Un niño necesita saber que en su casa en los brazos de sus padres puede estar seguro, ese sentimiento le cerrará toda puerta a un temor insano. De adulto no se refugiará en la timidez para no tomar riesgos.

Mi consejo, medite en los siguientes tres puntos:
1. Si le cuesta recibir amor, confiar en el amor de otros y aún siente que Dios no le ama.
2. Si es perfeccionista, le cuesta perdonar y no cree posible que le perdonen sus errores.
3. Si dentro suyo se siente desvalido, le teme al rechazo, aún su mascara de severa, de perfeccionista, de valentía absoluta, no le protege en secreto.
Usted requiere ser sano interiormente para disfrutar una salud integral y disfrutar su vida y la de los suyos.

Por favor.

• Ore y pídale a Jesús venir a su lado y ayudar a perdonar sus resentimientos.
• Pídale sentir su protección, su amor y su perdón.
• Busque una persona espiritual madura que pueda ayudarle, muchas veces necesitamos que alguien nos escuche y ore por nosotros.
• Lea la Biblia y reemplace esas palabras que usted mismo se dice por la Palabra, por ejemplo sorpréndase leyendo Isaías 43: 3 – 5.

“Porque Yo soy tu Dios y te pondré a salvo, Yo soy tu Dios Santo, yo te amo tu vales mucho para mi.
Para salvarte la vida y para que fueras mi pueblo tuve que pagar un precio muy alto.
Para poder llamarte mi pueblo entregué naciones enteras.
No tengas miedo yo siempre estaré contigo te llamaré de donde quiera que estés; te haré volver a tu tierra para volver a ser mi pueblo”

MIGDALIA