LA HIGUERA ESTERIL
Marcos 11:12-15 y Marcos 11:20-21
La higuera es un árbol frondoso que produce frutos casi todo el año. En invierno, durante dos meses, produce frutos sin sabor y deja caer sus hojas como señal de que el invierno ha comenzado. Estos frutos, fuera de temporada se caen al menor movimiento de las ramas del árbol. La higuera simboliza frutos y sombra en abundancia y es un árbol muy estimado en Israel. En el Antiguo Testamento, cuando se hablaba de castigar al pueblo por su desobediencia y desenfreno, se decía que serían destruidas sus higueras, sus vides y olivos, entre otros.
Cuando Jesús busca frutos en la higuera, la cual, fuera de tiempo, tiene abundantes hojas y, no encuentra nada, salvo hojas…. El la maldice y le dice que nunca más nadie comerá de sus frutos….Este pasaje identifica a los cristianos que desde sus cómodas posiciones, tienen conocimiento profundos de la Biblia, pero que no producen ningún fruto ya que solo son oidores y no hacedores de la Palabra
El modelo que dejó Jesús, hace más de 2000 años, donde nos dice: Id y predicad a todas las naciones ya que los campos están blancos y los obreros son pocos…, no es cumplido por estas higueras del presente las cuales ya tienen su sentencia sino hacen los cambios pertinentes.
El cristiano que no cumple con este mandato es como esa higuera estéril que debe ser sacada para que no haga mal uso de la tierra donde fue plantada, la buena tierra que debe dar fruto a tiempo.
En Lucas:13: 6-9, Jesús, nuevamente hace énfasis de la higuera estéril. Cuando llega el dueño de la viña y no encuentra frutos, le pide al viñador que la corte ya que hace tres años que está allí plantada y no da higos; por tal motivo no debe seguir usando esa buena tierra. Nuevamente vemos la comodidad de algunos cristiano, conocedores de la Palabra, pero que no producen frutos; en vano tienen conocimiento, en vano se alimentan a diario de la Palabra sino llevan el consuelo a los afligidos y el evangelio a quienes lo necesitan.
Pero el Señor, en su infinita misericordia, escucha el ruego del viñador, que viene a ser el buen pastor que le pide una oportunidad mas y que le permita abonarla y moverle la tierra a su alrededor y si aún no da frutos, entonces será cortada. Esta nueva oportunidad nos la dio Jesús cuando dio su vida por nosotros en la cruz y hoy, se sigue dando esa oportunidad cuando nuestro pastor o un hermano piadoso, intercede ante el Padre en oración constante y en continuo ruego, por nuestras transgresiones, cuando nos exhortan con paciencia y amor, cuando nos llevan de la mano y nos ayudan a levantarnos... Pero, si cumplido el plazo, el siervo no da buenos resultados, igual que la higuera, será echado al lago de fuego donde arderá por toda la eternidad.
Dios es misericordioso, nos ha dado muchas oportunidades, pero ya es tiempo que hagamos los correctivos, porque el tiempo se acaba, los campos está, blanco…y los obreros son pocos, Además, el Señor está a la puerta, el día y la hora nadie lo sabe, solo el Padre que está en el cielo. Estemos vestidos con la armadura de Dios, atentos, obedientes haciendo siempre su voluntad y dando lo que por gracia recibimos. Entonces, despierta tu que duermes; qué esperas para dar frutos de honra para el Padre y no ser cortados o secados desde la raíz?.
Escuchad y oíd; no os envanezcáis, pues Jehová ha hablado. Dad gloria a Jehová, Dios vuestro, antes que haga venir tinieblas, y antes que vuestros pies tropiecen en montes de oscuridad, y esperéis la luz y os la vuelva en sombras de muerte y tinieblas. Mas si no oyereis esto, en secreto llorará mi alma a causa de vuestra soberbia; y llorando amargamente se desharán mis ojos en lágrimas, porque el rebaño de Jehová fue hecho cautivo.
Jeremías 13:15-17