Confesiones de un cristiano

Por Alfredo dimiro

Una de las formas de restaurar la imagen interior perdida es confesando lo que usted es en Cristo.

1- Confesión de fe

Dentro de usted vive un gigante invencible. Allí habita el poder que tiene la fe de Dios, y esa fe nunca fracasará. Entonces, ¿por qué a veces fracasamos? Esto se debe a que no tenemos una imagen correcta de la fe en nosotros.

La fe de Dios es una super fe que funciona. Todo lo que usted anhele por medio de la fe en Dios lo logrará si su fe está basada en la Palabra de Dios. La Biblia dice que “todo lo puedo en Cristo”. Muchos cristianos viven declarando que no pueden. Si usted tiene la imagen del “no puedo” en su mente, debe cambiar ese pensamiento y colocarlo en la imagen de Dios. Porque en Cristo todo lo puede. Esa es la imagen ideal y correcta. En Cristo todo lo puedo vencer. No hay vicio que pueda contra usted. No hay tentaciones que lo controlen. No hay pobreza que lo derrote, porque todo lo puede en Cristo. Nunca se mire fuera de Él, aprenda a mirarse a través de la Palabra.

Sabemos que para Dios no hay nada imposible, pero también dice el libro de Marcos 9:23, que para el que cree todo es posible. La Biblia declara que si para Dios todo es posible, también lo es para nosotros. Usted puede lograrlo como Dios también puede. Si Dios nunca se enfermó, usted puede vivir sin enfermarse.

Hay una perfecta combinación entre la vida de Dios y la suya. Si usted cree como Dios cree, todo lo que se proponga lo logrará. No olvide que Cristo sanó enfermos, libertó endemoniados, controló todo los factores naturales y resucitó muertos. Pero recuerde siempre que, “mayores cosas harán”, dice la Biblia.

2- Usted es amor
“Amados, amémonos unos a otros; porque el amor es de Dios. Todo aquel que ama, es nacido de Dios, y conoce a Dios” (1° Juan 4:7).

El amor no es un sentimiento, sino una entrega. Esto explica el porqué hay tantos matrimonios destruidos, ambos dejaron de entregarse el uno hacia el otro. Uno de los mayores conflictos es que la mayoría de las personas sólo piensa en recibir y satisfacer sus necesidades y no las del otro.

Pero si usted nació de nuevo, fue equipado con el amor de Dios. Debe entender y creer qué es el amor, e inclusive, dice la Biblia que debe amar a sus enemigos. No pida a Dios amor, usted véase como el amor de Dios aquí en la tierra porque esa es la imagen interior que Dios quiere que usted tenga.

3- Usted es una buena persona

Afirmo esto porque sé que Dios no hace desechos, Él hace hijos. Tal vez crea de usted mismo que no es bueno o existen muchas premisas que lo acusan, pero recuerde que todo lo que Dios hizo es bueno.
Usted no es el resultado de ninguna explosión ni mucho menos de un mono. Su vida provino de Dios y es por ello que es una buena persona.
Muchos cargan sobre sí la imagen de los errores del pasado, pero la Biblia dice que debemos tener la buena imagen de Dios, y Dios es bueno.

“Jehová es bueno, fortaleza en el día de la angustia; y conoce a los que en él confían” (Nahum 1:7).

Las personas se autocalifican como malos padres, malos trabajadores, malos amigos, pero recuerde que Dios nos califica diciéndonos que somos lo mejor que Él creó.

La mayor virtud del diablo es hacernos creer lo que no somos, y hacernos vivir lo que Dios no planificó para nuestras vidas.

Cuando Cristo miraba al apóstol Pedro, lo veía integro. Cuando miraba a Judas, lo veía totalmente fiel. Jesús los trataba de acuerdo a la imagen interior de Dios.

¿No es el mismo Pedro que negó a Jesús el que escribió las epístolas? ¿No es el mismo Juan que pidió fuego destructivo contra una ciudad a la que él escribió diciéndoles: “hijitos amados”? Jesús nunca miró los principios, Él siempre observó sus finales. Jesús veía la imagen de Dios en ellos y hoy Dios ve la imagen de Cristo en nosotros.

Muchas personas tienen problemas con sus físicos, pero si usted tiene revelación de que su cuerpo es el templo del Espíritu Santo (1° Corintios 6:19), comenzará a respetarse porque comprende que es propiedad de Dios.

4- Usted tiene completa salud
Aunque tal vez le parezca increíble, usted puede vivir en completa salud.

“Hijo mío, está atento a mis palabras; inclina tu oído a mis razones. No se aparten de tus ojos; guárdalas en medio de tu corazón; porque son vida a los que las hallan, y medicina a todo su cuerpo” (Proverbios 4:20-22).

La Palabra de Dios es vida y si usted vive esa Palabra, vivirá en la salud de Dios. Observe lo que dice Exodo 15:26:

“Si oyeres atentamente la voz de Jehová tu Dios, e hicieres lo recto delante de sus ojos, y dieres oído a sus mandamientos, y guardares todos sus estatutos, ninguna enfermedad de las que envié a los egipcios te enviaré a ti; porque yo soy Jehová tu sanador.”

La imagen de su vida debe estar formada por un Dios sanador. La mayoría de los cristianos confiesan la enfermedad, si embargo, Cristo murió por todas ellas. La Palabra es un espejo y podemos ir a ella y mirarnos tal cual Dios nos ve. La salud y la sanidad están en la Palabra, véase a través de ella y verá su completa salud.

MIGDALIA