REGLAS PARA SER FELIZ - AMIGOS UNIDOS EN CRISTO

REGLAS PARA SER FELIZ

I. Ten fe en Dios, pero que sea una creencia acompañada de palabras y hechos concretos. Sin embargo, no te quedes cruzado de brazos en espera de que te llegue un milagro del Cielo, o es posible que te conviertas en un ateo resentido con la Providencia porque dizque nunca fuiste tomado en cuenta por el Señor.
II. Cree en ti: en tus habilidades, en tu fuerza interior. Ámate con balanza. Edúcate con tenacidad. Abandona ya el complejo de niño sin pañales, y termina de madurar. Evoluciona.
III. Levántate de la cama a tiempo y haz algo significativo por ti y la Humanidad. Al haragán le llega de todo, menos el éxito. Al que madruga, Dios lo ayuda.
IV. Lee para adquirir conocimientos, y si no te gusta leer, entonces no vayas luego a calumniar a los maestros de la escuela cuando en el mercado laboral sólo te puedas agenciar un puesto de poca monta. A cada quien le dan según sus conocimientos. Instrúyete todo lo que puedas.
V. Descubre tu vocación y dedícate a ella en cuerpo y alma. Jamás trabajes para lo que no naciste. Mira que no hay peor pintor que aquel que odia los colores del arco iris.
VI. Al mundo los rigen dos fuerzas supremas: La del Bien y la del Mal. Para esta última, debes ármate de voluntad con el fin de poder contrarrestar las conflictos de la vida.
VII. Aléjate de los malos vicios ahora, antes de que sea demasiado tarde. Los malos vicios tales como el tabaquismo, el alcoholismo, las drogas... son como las células malignas del cáncer que se propagan por todo el cuerpo sin control causándole estragos con gran lentitud, pero progresivamente, y cuyos efectos son devastadores e irreversibles.
VIII. Ahorra sin rayar en la tacañería. Presta atención a las hormiguitas del campo: ellas recogen en el caluroso verano lo que quieren comer en el crudo invierno. No gastes lo que todavía no has ganado y organiza tus finanzas ahora que tienes tiempo o llegarás a viejo sin dinero y resentido con la vida.
IX. Sé sencillo. No te compliques la vida por querer agradar la vanidad de los ojos de los demás.
X. No vivas un mundo de mentiras para limpiar tus faltas o para perjudicar a otros a favor tuyo. Mira que la mentira es lo más parecido a una mina de bombas activas en la que cualquiera puede salir reventado, incluso el mismo que la preparó.
XI. Disciplínate: Haz ejercicio con frecuencia e ingiere alimentos saludables, para que evites lo evitable: hacer rico al doctor con tus postreras y provocadas enfermedades.
XII. Ten paciencia para con tus planes y proyectos personales. Mira a la secuoya (el árbol más alto del mundo). ¿Acaso crees que su tamaño es asunto de un año? ¡Claro que no! Una secuoya puede tardar cerca de 4, 000 años en alcanzar su máxima altura. Así que, no te dejes dominar por la intranquilidad cuando quieras lograr algo.
XIII. Procede en cada acto social con honestidad. No manches tu nombre ni por una moneda ni por todo el oro del mundo. Cuídate de no perder jamás lo único que te diferencia de los animales: tu dignidad.
XIV. Apártate de la crítica soez. En especial, no critiques lo que tú mismo haría si tuvieras la oportunidad de hacer. No hables mal de nadie a sus espaldas, si debes corregir a alguien por una mala acción, no lo reproches en público, díselo en privacidad y con respeto. Si en verdad quieres limpiar el mundo empieza por barrer debajo de tu cama.
XV. Si quieres asegurarte un buen futuro, deja de creer en las hadas madrinas o en el genio de la lámpara mágica. Tu destino es y será siempre el resultado de un 90 % de tu propio esfuerzo y un 10% de las circunstancias. Tienes derecho a soñar, pero pisando tierra.
XVI. Ten muchos amigos optimistas y ellos te contagiarán de su idealismo.
XVII. No te afanes tanto en hallarle sentido a la vida, La vida se te dio para que la disfrutara sanamente, no para que te la pasaras racionalizándola en demasía. ¡Vívela!
XVIII. Sé prudente en pensamientos y en acciones. Mientras todo el mundo a tu alrededor esté perdiendo los tornillos de sus cabezas, asegúrate de que el tuyo esté bien ajustado a la tuya.
XIX. Cásate con la persona correcta y en el momento correcto -ni muy joven ni muy viejo- Únete a otra persona sólo por amor, o acabarás con el corazón roto y maldiciendo a Cupido y a la suegra.
XX. Sé cortés con todos y todo. Estoy segurísimo que si los esposos se trataran como lo haría un buen camarero con su cliente, habría menos divorcios, aunque esto signifique dejar en la miseria a los abogados...
XXI. Controla tu ira, o ella se encargará de descontrolarte, obviamente para tu propia desdicha. En vez de enojarte por un revés, ríete de tu mal momento y sigue hacia delante. A nadie se le he caído la cabeza por haberse disculpado.
XXII. Saca tiempo para ti: Para meditar, para purificar tu alma, para escuchar el silencio, para reencontrarte contigo mismo. Evoluciona sicológica y espiritualmente.
XXIII. No vivas en el mundo con miedos, Ármate de valor y lucha en contra de tus turbaciones como un verdadero guerrero con arrojo y firme voluntad.
XXIV. Si sabes el nombre completo del presidente de tu país y aún no sabes el de la persona que limpia el edificio donde trabajas, todavía necesitas aprender que el valor de una persona no se lo da el puesto que ocupa en la sociedad, sino su condición única de ser humano. XXV. Prohíbete firmemente ensuciar estos tres lugares: Tu casa, porque es el hogar de tu sagrada familia. Tu corazón, porque es el hogar de tus emociones y sentimientos y, el Mundo, porque es el lugar de los minerales, de las plantas, de los animales y de los seres humanos. No seas egoísta y déjale algo a la generación venidera.

GRACIAS A LA HNA. GRACIELA POR EL FONDO