Hoy recogí una hoja sucia,
inútil, triste;
la hoja rota de un calendario.
Un arrugado papel,
un trozo de tiempo
arrancado de mi historia.
En esa hoja yacía mi hoy de ayer,
mi ex-yo, mi nunca más.
Allí estaban los no puedo,
los no quiero y los quizás;
mezclados con mis esfuerzos,
frustraciones y silencios.
Allí estaban apiñados,
junto a lunas y dias de colores,
miles de planes y sueños,
que hoy son dos o tres recuerdos.
Guardé esa hoja pensando...
devolverla al calendario,
pero en mi hoy de mañana,
no hay espacio, ni tiempo,
ni deseos, de acoger un ayer,
que he recogido del suelo.
Dio te bendiga cada dia.
Con amor siempre tu amiga.