FIERAS
¡CAE LA NOCHE, EL SILENCIO, VITAL COMPAÑÍA! se aparece nuestra maestra, la imponente...la luna sentimos con ardor, VORAZ, que hos hace...¡AULLAR! los dedos, se transforman en garras, nos razgamos el olfato se apodera de los instintos, nos consumamos cada libar que sale de alma, es la flama incontrolable nos probamos, cada renglón, cada extremo, insaciable la quemazón provoca un elixir, MAGNO, nos atasajamos las hormonas se retuercen de sabor, ¡PURA ABRASIÓN! es que, el poder del ambiente, es tan exquisito, abruma cuando nos adueñamos de cada cuerpo, éxtasis RETUMBA nada se puede hacer, al avivamiento de esta electricidad que penetra muy hondo, en la mente, y todo nuestro ser un proceso de coición que alarga más, y más el fogaje cada minuto, se agiliza el orgasmo, nos hacemos átomo esa manifestación tan rica, que no hay detención, sí domo porque, así exigo que sea de esta manera, tan vulnerable nunca parar ante toda la delicia, toda fiebre hace venerable y por eso, hemos de dominar las brazas que nos absorbe al tener los cabellos, el resto de ese tierno fuerte, te sorbe es un monumental episodio, que si por mi fuera, ¡IMPARABLE! poder rememorar, cada lenguetazo sometido, ¡PERDURABLE! a~nicar la mordida, digerir cada pedazo de piel, ¡INIGUALABLE! seremos...¡FIERAS! a tal sensación, sin haber la rendición seguro estaremos, que, cuando la sangre HIERVE, es fundición siempre, forjaremos, hacia lo eterno, vivir lo divino, ¡PERDICIÓN! pero, sí sabremos, al volver, la señal se une, a nuestra INANICIÓN.
JOSE LOPEZ
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