AVIVA EL FUEGO.
Cuentan
que un rey muy rico de la India, tenía fama de ser indiferente a las
riquezas materiales y hombre de profunda religiosidad, cosa un tanto
inusual para un personaje de su categoría. Ante esta situación y
movido por la curiosidad, un súbdito quiso averiguar el secreto del
soberano para no dejarse deslumbrar por el oro, las joyas y los lujos
excesivos que caracterizaban a la nobleza de su tiempo. Inmediatamente
después de los saludos que la etiqueta y cortesía exigen, el hombre
preguntó: “Majestad, ¿cuál es su secreto para cultivar la vida
espiritual en medio de tanta riqueza? El rey le dijo: "Te lo
revelaré, si recorres mi palacio para comprender la magnitud de mi
riqueza. Pero lleva una vela encendida. Si se apaga, te decapitaré" Al
término del paseo, el rey le preguntó: "¿Qué piensas de mis riquezas?"
La persona respondió: "No vi nada. Sólo me preocupé de que la llama no
se apagara" El rey le dijo: "Ese es mi secreto. Estoy tan ocupado
tratando de avivar mi llama interior, que no me interesan las riquezas
de fuera" Muchas veces deseamos vivir como mejores cristianos y
tener vida espiritual, pero sin decidirnos apartar la mirada de las
cosas que nos rodean y deslumbran con su aparente belleza. Procuremos
"ver hacia adentro" y avivar nuestra llama espiritual, pues: - Al tener
nuestra mente y nuestro corazón puestos en el Señor, podemos aprender a
conocerle y amarle. - Las trivialidades y preocupaciones de la vida no
podrán apartarnos del buen camino. - Crecerá nuestro amor por la
familia y nuestros semejantes, que son imagen de Dios. Viviremos alegres en esta vida, preparándonos para alcanzar la felicidad eterna al lado de nuestro Padre. Proverbios 22:4 " Riquezas, y honra, y vida, son la remuneración de la humildad y del temor de Dios" Proverbios 11:28 " El que confía en sus riquezas, caerá: Mas los justos reverdecerán como ramos"
Anónimo
" Porque para mi, el vivir es Cristo; y el morir ganancia." Filipenses. 1: 21
Con Cariño Gladys Nancy
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