Miércoles, 13 de enero de 2010
Acercamiento profundo
Léase el Salmo 139
Examíname, Dios, y conoce mi corazón; pruébame y conoce mis pensamientos.
-– Salmo 139.23 (RVR)
CUANDO era estudiante, alguien me invitó a una iglesia evangélica. Ahí escuché por primera vez las palabras de esta porción del Salmo 139 en un hermoso canto. Las frases se quedaron grabadas en mi corazón: «Examíname, Dios, y conoce mi corazón. . .». Pasaron 5 años. Por las noches, antes de dormir, sentía la necesidad de un acercamiento profundo con Dios. Entonces, desde el fondo de mi corazón repetía las frases: «Examíname, Dios. . .». No tenía idea de que fuera una porción bíblica, sólo sabía que la oración describía mi necesidad.
Un bendito día, en otra ciudad, tuve un encuentro personal, definitivo, contundente con mi Señor Jesús. Empecé a conocerle y también a su Palabra. Un mundo maravillosamente eterno se abrió ante mí. Una mañana, en mi devocional, leí el Salmo 139. Fue grande mi emoción y contentamiento cuando encontré las viejas palabras amadas: «Examíname, Dios. . .».
Desde entonces, estoy plenamente convencida de que la Palabra no vuelve vacía, sino que cumple con el propósito de Dios. Yo soy un testimonio vivo de que la Palabra tiene poder para convertir los corazones.
Sa. Blanca Eugenia Badilla (Sonora, México)
Oración:
Amado Dios, sigue revelándote a nuestra vida por tu Palabra y tu Espíritu. En el nombre de Cristo pedimos. Amén.
PENSAMIENTO PARA EL DÍA
Dios nos revela su voluntad a través de su Palabra.
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OREMOS:
Por los estudiantes con inquietudes espirituales.