ADÓRO TE DEVÓTE
Por
Emma-Margarita R. A.-Valdés
Aletea en mis labios un himno de silencio.
Me inclino ante tu altar.
Divinidad oculta. Sacramental presencia.
Me sumerjo en tu océano sin fondo y sin orilla.
Con devoción te adoro.
Me incorporo a tu Misa. Milagro renovado.
Banquete y sacrificio. Memorial de tu gloria.
Habitas en mi mente, mi materia te anhela,
y acojo tu sustento, alimento del alma.
Gozo de la Verdad encontrada en tu voz.
Me elevas al lugar donde mora el Espíritu.
Me doblego, me olvido de mí y de mi ansiedad
con tu mirada libre y tu dulce palabra.
Penetras en mi ser
y refleja mi rostro tu imagen luminosa.
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