Tres razones para no adorar a la Virgen María

Lo que no haré en este mensaje:

• Invitarte a que dejes de rezar y adorar a María.
• Invitarte a que te unas a una religión o algo por el estilo.
• Tratar de imponerte mi pensamiento y lavarte el cerebro.
• Insultar a quienes dan adoración a María.

Aquí solo expondré las razones por las que no adoro a María.

Tómalas o déjalas.

El catolicismo argumenta que a María le dan veneración y no adoración, pero creo que cambiarle el nombre a las cosas no cambia las cosas ni la realidad de los hechos.

A las figuras de María se les arrodillas, les rezan, etc… Y eso, aunque a muchos les duela, es idolatría. Así lo veo. Es mi opinión, y no creo que sea diferente a lo que nos dice la Biblia.

María fue una mujer magnifica y concibió a Jesús siendo virgen. Sin embargo, sé que no tengo que adorarle, orarle a ella, y sé que no fue virgen toda su vida.

Contrariamente a lo que la gente suele creer, ella tuvo muchos hijos luego de Jesús (Mateo 12:46-47, Mateo 13:55-56, Marcos 6:2-3, Juan2:12, Hechos1:14, Gálatas 1:19).

María fue maravillosa, y en muchos aspectos, es ejemplar. Sin duda, merece respeto… Pero no adoración.

Preguntas para los religiosos que quieran criticar este mensaje luego de leerlo:

• ¿Te has preguntado como surgió el culto a María?
• ¿Te has preguntado por qué eso contradice la Biblia?
• ¿Has considerado la posibilidad de que las visiones y milagros de María sean un fraude? Curiosamente, siempre que algo así sucede, la economía local entorno al culto a María se vuelve más provecho$a.

Acá van mis 3 razones que quiero compartir contigo para no adorar a la virgen María:

1. Ella no me redimió.

Ni tampoco te redimio ¿o tiene el poder de hacerl?.

Ella fue una herramienta que Dios pudo no haber usado. El autor de mi salvación es Dios, no María. Ella ni pudo escoger si aceptar ser la madre de Jesús o no, al contrario de lo que muchos creen.

En Lucas 1;30-31, el ángel enviado por Dios le dice a María que ella será mamá. No le dice “Hey, ¿Quieres ser mamá?”.

Dios no le dejó elección a María. Dios conocía su corazón, y sabía que ella se sometería a su voluntad. Por eso ni se preocupó en preguntarle. Dios pudo haber escogido a otra mujer igual de magnifica si Él lo hubiese querido.

No hay margen para darle merito a María en el proceso de la redención de la humanidad. Dios cuidó el vientre de ella y se hizo cargo de Jesús. Él uso a María como un vaso.

María fue ejemplar y supo que solo Jesús merece toda la gloria.

Esto lo vemos a lo largo del nuevo testamento. Por ejemplo, cuando se acabó el vino en una boda y acudieron a María. ¿Qué dijo ella? “Hagan todo lo que él – Jesús- les diga” (Juan 2:5).

Otro pasaje CLAVE que debemos considerar con respecto a María es el siguiente en Lucas 11:27-28:

“Mientras él (Jesús) decía estas cosas, una mujer de entre la multitud levantó la voz y le dijo: Bienaventurado el vientre que te trajo, y los senos que mamaste. Y él dijo: Antes bienaventurados los que oyen la palabra de Dios, y la guardan.”

San Agustín al respecto escribió lo siguiente y a la luz de la Biblia tiene toda la razón:

“María fue más dichosa por aceptar la fe en Cristo que por concebir la humanidad de Cristo”.

2. Dios odia la idolatría.

Dios nos habla en su palabra de que es un Dios celoso.

Sin embargo, Él es celoso de una forma diferente a nosotros. Solemos ser celosos cuando tenemos envidia. Dios, a diferencia nuestra, es celoso cuando le damos a alguien (o a algo) lo que sólo Él merece.

Además de ser malagradecidos con Dios, la idolatría impide que podamos conocerle y nos impide hallar libertad porque nos aparta de la verdad (Juan 8:31-32). Por eso Dios la aborrece.

Solo Dios, cuando creemos en Jesús, nos salva en su misericordia de nosotros mismos y las consecuencias de ser independientes de Él. Dios nos ama y solo Él puede sanar, puede renovar vidas, puede hacer más de lo que podemos imaginar.

3. No necesito a María.

La principal de las razones por las que no le doy adoración a María.

¿Para qué pedirle algo a María, cuando puedo pedirle algo a Dios mismo? ¿Para qué darle devoción a alguien que no se levantó de su tumba y que no puede hacer nada por mí?

Jesús sí se levantó de su sepulcro, y me ha demostrado que es real y no es ningún placebo (como puede serlo el rezar a María). No necesito a María ni a sus diferentes versiones y presentaciones que abundan en el mercado.

Cuando crees en Jesús, o en mi caso, dejas de creer que es real, para saber que es real luego de haber tenido un encuentro personal con su amor, no necesitas nada más.

El verdadero y único Jesús lo llena todo, incluso la necesidad de adorar a algo que no sea Él.

Cuando lo conoces, quieres vivir para Él y adorarle únicamente a Él. Se está eternamente agradecido.

Es por esto que pienso que si una persona cree en algo aparte de Jesús, entonces no cree en Jesús, sino en una idea que tiene de Jesús. Es importante creer en Jesús para ser salvos (Juan 3:16).

Hay muchas cosas de Jesús que no conozco, pero hay algo de lo que sí estoy seguro: Antes de Jesús no tenía nada, ahora lo tengo todo. Tenía un corazón herido, ahora tengo un corazón nuevo. Estaba perdido, ahora estoy encontrado.

Mi vida no tenía sentido, ahora tengo la certeza de lo que me espera. No conocía el amor verdadero, y ahora el amor ha revolucionado mi vida.

Un religioso debe salir de la superficialidad de la religiosidad y permítele a Jesús entrar en su corazón.

En Jesús está todo lo que mi alma necesita, y mucho más. Por eso no adoro ni rezo a la Virgen María. Si has practicado la idolatría a María, no tengas miedo de acercarte a Dios. Él te ha perdonado de antemano y quiere que le conozcas.

PD: A la pregunta “¿Puede Dios usar a alguien que practica la idolatría?” Le tengo una respuesta: NO. Eso es lo que pienso, pero sin embargo, Dios puede usar algunas cosas que esa persona haga, sin usar directamente a la persona, para glorificarse.