QUE ES EL EVANGELIO ?   

2 DE CORINTIOS 5: 16 - 21

¿Qué es el evangelio? Esta es la pregunta que nos planteamos hoy. El pasaje de hoy en II Corintios 516-21 nos informa que, las cosas han cambiado tanto que Dios “habrá hecho algo.”

El evangelio es el mensaje acerca de lo que Dios ha hecho en Jesucristo para reconciliar al mundo consigo y las implicancias de estos eventos.

Todo ha cambiado, Dios ha hecho algo, y este algo ha revolucionado toda la vida del ser humano, en todos los aspectos de su vida. Pablo está hablando de un antes y un después.

Primera, y primariamente este evangelio tiene consecuencias en nuestra relación con Dios.

En II Corintios 5. 19, Dios estaba reconciliando al mundo consigo mismo, no tomándole en cuenta sus pecados.” En Cristo Jesús, Dios estaba reconciliando al mundo consigo mismo. El mundo con todo su pecado, su injusticia, opresión estaba siendo reconciliando con Dios. En la muerte de Cristo, el pecado del mundo fue pagado. En vez de tomando en cuenta nuestros pecados a nosotros, sino que fueron asignados a Cristo. Esto pecado, que había causado tanto sufrimiento, Dios no lo tomó en cuenta al mundo sino a Cristo. La lógica se explica en versículo 21. Versículo 21Al que no cometió pecado alguno, por nosotros Dios lo trató como pecador,* para que en él recibiéramos* la justicia de Dios. Para que recibiéramos la justicia de Dios. La justicia de Dios fue satisfecha no por nuestra santidad sino por la de Cristo. Realmente recibir la justicia de Dios sería recibir la ira de Dios pero “En Cristo” somos reconciliados a Dios. Nuestros pecados quedan perdonados. No había ninguna forma en que hubiéramos podido pagar nuestros pecados pero ahora, Jesús lo hizo en la cruz.

En segundo lugar el pero ahora tiene consecuencias en la vida social. Ligado al asunto de la salvación universal es que Dios ha hecho una nueva humanidad. II Corintios 16Así que de ahora en adelante no consideramos a nadie según criterios meramente humanos. Antes consideramos a todo el mundo según criterios meramente humanos. Pero ahora lo miramos por medio de ojos de Cristo. Y versículo 17. 17Por lo tanto, si alguno está en Cristo, es una nueva creación. ¡Lo viejo ha pasado, ha llegado ya lo nuevo! Otra vez Pablo está haciendo una comparación entre antes y ahora. El ahora tiene que ver con la nueva creación. Muchas veces esta nueva creación se ve en términos individuales, “ser una nueva criatura” pero realmente quiere decir que somos parte de la nueva creación. No es decir que no somos nuevas criaturas pero es ser nueva criatura dentro de la nueva creación. La creación en Cristo Jesús, una humanidad unidad en Jesús Cristo con las divisiones naturales llevadas a la cruz y sumidas en Cristo.

Finalmente tiene consecuencias en la relación con el mundo. Por la muerte y resurrección de Cristo, Dios va a crear una nueva creación bajo su señorío. En versículo 17 tenemos esta frase. 17¡Lo viejo ha pasado, ha llegado ya lo nuevo! Es ser parte de la Nueva Creación. Pues, la nueva humanidad es parte de la nueva creación. Esto es el evangelio, somos parte de la nueva creación en Cristo.

 Pues ¿qué es el evangelio? El evangelio es la buena noticia de la reconciliación universal en Jesucristo. Es reconciliación con Dios, reconciliación entre los seres humanos y la reconciliación de todas las cosas en Jesucristo.

Anunciar y vivir la buena noticia que todos pueden tener la reconciliación con Dios. Somos reconciliados con Dios...tenemos un ministerio de reconciliación. No compartimos el evangelio como si lo descubriéramos nosotros mismos sino como gente que ha recibido la reconciliación y la queremos compartir con otros. Pero debemos compartirlo. Pero también tenemos que vivir la buena noticia también. En esta situación de crisis, vivir la reconciliación con Dios es vivir en fe, en la confianza que nuestras vidas; no importa cuán difícil se ponga la crisis, están en las manos de Dios. Somos libres, vivimos en la luz, vivimos en comunión con Dios, vivimos en la seguridad que nadie mas puede tener.

Anunciar y ejemplificar la reconciliación uno con otro. Es anunciar la posibilidad de terminar con el odio, el rencor social y las divisiones en el mundo. Anuncia la posibilidad de escapar de nuestros prejuicios. Según esta enseñanza nuestros pasados no necesitan encarcelarnos. Pero como el punto anterior no basta anunciarla sino tenemos que serlo o ejemplificarla. ¿Primero soy miembro de una clase social (sea rico, pobre, lo sea) o soy miembro de la nueva humanidad? Cuando hay conflicto, ¿con quién me identifico? ¿Con mi clase social? ¿Con mi partido político? ¿Con mi país? ¿Mi cultura? O ¿me identifico primero con la comunidad de la nueva humanidad? Y ¿con quién se identifica la comunidad de la nueva humanidad?

Obrar a favor y esperar la reconciliación de todas las cosas. Dios finalmente va a reconciliar todas las cosas bajo Cristo. Que sea las vidas de individuos, estructuras sociales, naciones, políticos, etc. Tenemos que proclamar a cerca de aquel día cuando Jesús vuelva y toda rodilla se doblará y toda lengua confesará que Jesús el Mesías es el Señor. Esperar es vivir en anticipación. Los primeros cristianos vivían en la esperanza que viene ya el Señor, para liberarlos de su sufrimiento. Hoy en día los que vivimos en el lujo material, hemos perdido esta esperanza, pero entre los más pobres esta esperanza vive.

           ¡Lo viejo ha pasado, ha llegado ya lo nuevo!

                            II Corintios 5:16-21

Gracias a la hermana Silvia por el fondo