EL MAR EN MÍ
Cuando el sol juega a esconderse, nacen las lágrimas tibias que caen golpeando mi pecho y huyen al confín de la vida.
Amo todo lo que aún poseo, amo lo que sé que he perdido, alma deshecha en tiempo, corazón plagado de sonidos.
Amo ese mar calmo y azul que murmura un suave canto y la luz mágica de aquel faro que la angustia troca en llanto.
La arena tibia de los veranos que de mí se fueron alejando y aunque jamás regresaron, aún los sigo recordando...
Todavía arde en mi pecho la llama de la esperanza y el brillo de mis pupilas bastará para alcanzarla.
A pesar del sabor amargo que la vida me ha dejado, conservo intacta la ilusión de despertarme a tu lado.
A.D
SALUDOS DE TU AMIGA
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