Sempre, Sempre
Astros momificados y bravíos sobre cielos de abismos y barrancas como densas coronas de carlancas y de erizados pensamientos míos.
Bajo la luz mortal de los estíos, zancas y uñas se os ponen oriblancas, y os azuzáis las uñas y las zancas ¡en qué airados y eternos desafíos!
¡Qué dolor vuestro tacto y vuestra vista! intimidáis los ánimos más fuertes, anatómicas penas vegetales
Todo es peligro de agresiva arista, sugerencia de huesos y de muertes, inminencia de hogueras y de males.
Miguel Hernández
04.05.10
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