Que altas murallas impiden Que el mundo puedas alcanzar, Tu mirada se pierde en la lejanía Pensando en como escapar.
A tu solitario reino No puedo penetrar. Días de sollozos y lágrimas Marcaban mis horas de impotencia Por no poderte rescatar.
Hoy me detuve a observar Desde lejos tu castillo de cristal, La pena me segaba, no dejaba palpar las risas y alegrías Que tu corazón me hizo escuchar.
Comprendí entonces de tu mundo Encantado, de príncipes y hadas, de arco iris de bellos colores por donde se deslizaban.
!!!Vive mi niño!!! Goza y disfruta lo que DIOS Para ti creó, Olvida mi egoísmo y mi dolor. Hoy aprendí que la vida Esta hecha de azúcar y de sal, Se feliz mi niño,