Libertá
¡Mis cartas!
¡Mis cartas! Papel muerto... mudo y blanco... Y no obstante palpitan esta noche en mis trémulas manos cuando aflojo la cinta y caen sobre mis rodillas.
Ésta decía: Dame tu amistad... Ésta fijaba un día en primavera para tocar mi mano... casi nada, ¡pero cuánto lloré! Ésta... un papel...
decía: Te amo, y yo me estremecí como si Dios rasgase mi pasado. Ésta, Soy tuyo... pálida la tinta
por estar junto a un pecho tumultuoso. Y esta última... ¡oh, amor!, no fuese digna de lo que dices si lo repitiera
Elizabeth Barret
18.10.11
|