La
Navidad es la fecha que más anhelamos que llegue a nuestras vidas,
significa la reunión de familias, de padres e hijos, de hermanos,
parientes y amigos.
Época de
reflexión... de darnos cuenta de nuestros aciertos y desaciertos, sueños
logrados, fe y esperanza, los villancicos y música navideña, que tocan
las fibras más sensibles de nuestra alma, haciéndonos vibrar de emoción.
Es la época de recordar que todos somos hermanos.
Aprovecha esta Navidad para perdonar a quienes te hirieron, y comienza el año con tu corazón lleno de amor.
Comparte tu
alegría y tu cena con quién se encuentre solo, que no tenga familia, o
que se encuentre triste. El invitado puede representar la figura de
Jesús.
Y así podremos recibir la bendición de un Nuevo Año.
De la red