NUESTRO NIÑO INTERIOR
Nuestro niño interior tal vez quiere despertar y volver a reir y a soñar como lo hacia
en otros tiempos. Ese niño que de pronto jugaba, compartia, sonreia, y no
sabia del dolor, de las heridas, que día a día gastaba toda su energía sin pensar
en el futuro ya que no conocia esa palabra, ni podía imaginar a qué se refería cuando
algun adulto la pronunciaba.
Ese niño que vive en ti, que vive en mi, que de pronto se quedó
dormido porque sintió que no valía la pena estar despierto preso de cosas que
desconoce como son las preocupaciones, los problemas laborales,
la falta de dinero, las injusticias, el engaño, y todo aquello que te cansa y
que tambien a él lo llenó de cansancio porque lo dejaste de lado, medio olvidado
o totalmente o solo lo recordas cuando regresas con tus pensamientos
a aquellos momentos en que consideras que fuiste feliz, muy feliz...
Tenemos que despertar a ese niño, necesita estar despierto y volver a reir,
porque si él no rie nosotros tampoco,
si él no es feliz nosotros tampoco.
¡¡Vamos!! Es el momento de mirar hacia adentro, y verlo, está ahí esperando que
aprendas a vivir este presente que
se nos va tan rápido, está en vos esperando que vuelvas a soñar, que algún día
grites de felicidad,
que sienta
que podes bailar al compás de tu música sin importarte si es tu música preferida.
Perdón, amor,
y otras tantas palabras endulzan
los oidos de ese niño y lo alimentan con caricias en el alma.
No sos más joven ni sos un anciano por la edad cronológica que tengas, sos tan joven
como el niño que vive en tí,
pero si dejas que siga adormecido, si dejas que ese sueño sea eterno entonces
sí podrás tener
la vestimenta y el cuerpo de un adolescente
pero tu espíritu estará envejecido.
Si hoy volves a reir por cualquier cosa que te sucede,
si hoy llegas a casa y te perdes en algo que te alegra,
si cuando vas por la calle te da risa el sombrero de alguien que pasa
a tu lado, y si al salpicarte los pantalones
con barro, te reis porque sentis que los lunares no te quedan bien:
la mitad de la batalla está ganada...
Lo despertaste y él espera que así seas todos los días, porque es el
encargado de mostrarte la felicidad
en las pequeñas cosas y eso forma parte del gran misterio de la vida.Graciela De Filippis
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