Como ser feliz sin aire acondicionado

Escrito por Diego el Martes 6 de diciembre del 2011

Mucha agua

Con agua el alivio es casi inmediato durante una hora o más.

Mantiene la nuca a la sombra, con una gorra hacia atrás o levanta el cuello. Aunque lo mejor es poner un pañuelo mojado en la parte posterior del cuello. El sensor del sistema de control de temperatura del cuerpo está en esa área, por lo que con este método puedes hacer que el resto del cuerpo “piense” que hace frío.

Ata una bolsa de hielo detrás de la cabeza.

Usa el pelo atado hacia arriba. Esto ayudará a mantener el cuello fresco y relativamente libre de sudor.

Humedece todo el cabello. Aunque puede arruinar tu peinado, el agua enfriará la cabeza.

Moja una camiseta, escúrrela, póntela, y siéntate donde el aire fluya, o delante de un ventilador. Otro truco es usar una camiseta de manga corta y poner agua en las mangas solamente.

Un chorro de agua fría sobre las muñecas durante 10 segundos cada mano reduce la temperatura del cuerpo por aproximadamente una hora.

Remoja los pies en un balde de agua fría. Se puede hacer en cualquier lugar y no tienes que permanecer en la bañera. El cuerpo irradia calor de las manos, pies, cara y orejas, por lo que cualquiera de estos lugares fríos bajarán la temperatura del cuerpo.

Vestimenta

No uses nada si estás en una situación donde puedes ir sin ropa, esto es lo más cómodo y natural para sentirse fresco.

Usar un traje de baño o ropa interior, es la segunda opción.

Usa libremente tejidos naturales (algodón, seda, lino) en lugar de poliéster, rayón, y otras fibras artificiales.

Usa colores claros. Los colores más obscuros absorben el calor del sol y mantienen la ropa caliente por más tiempo. Los colores claros y la ropa blanca reflejan la luz y el calor.

Cuerpo a tierra

Como los perros. El aire caliente asciende (porque es menos denso que el aire frío), por eso cuanto más abajo estés mejor. Si tu casa tiene más de dos pisos, baja las escaleras. Siéntate en muebles bajos o en habitaciones con superficies lisas y sombreadas, como pisos de azulejo o madera desnuda.

Si tienes un sótano, límpialo y conviértelo en tu sala de estar

Cierra las persianas y cortinas

Para bloquear el calor del sol. Tan pronto como el sol llega a tu edificio en la mañana, cierra las persianas y mantiene las puertas exteriores y ventanas cerradas a lo largo de las horas más calurosas del día. Hasta que el calor baje un poco como para abrir todo y refrescar la casa.

Mucha menta

Prueba el sabor refrescante de la menta o unos pocos productos para refrescar la piel.

• Crema de menta
• Jabón de menta
• Infusiones de menta para remojar tus pies

Mini aire acondicionado casero

Un truco popular no patentado.

Toma un vaso y llénalo de cubitos de hielo hasta el borde. Entonces lo mantienes cerca de la boca y soplas suavemente en el vaso. El hielo hace que el aire que entra al vaso se enfríe drásticamente, y el aire tiene sólo una forma de salir; directo hacia tu cara.

Para mejorar el sistema, coloca cuatro vasos llenos de hielo delante de un ventilador bien apuntado a tu cabeza.

Piensa en frío

Lee un libro sobre Noruega, o sobre gente que ha escalado el Monte Everest.

También es recomendable mirar “La marcha de los pingüinos”, “La era de hielo”, “El día después de mañana”, o “Viven”.

No hay que olvidar que la raza humana vivió durante muchos años sin aire acondicionado. Dentro de los límites de tu situación de salud en particular, tu cuerpo puede acostumbrarse al aumento de la temperatura del verano. Sólo te acostumbras al hecho de que puedes tener que alterar sus actividades y el horario para combatir el calor.

Si todo esto falla, ve al centro comercial, biblioteca, iglesia, cine o algún otro edificio público con aire acondicionado.