Penetro en el laberinto de lo desconocido
pretendiendo esconderme de la realidad
Asumo con todo gusto que con no verla
me pueda de a poco alejar y olvidar
El tiempo traicionero no se presta a más
Ha llegado el momento de dejar salir la verdad
Ayer miraba hacia el cielo sin descansar
hoy me canso al estar tranquilo y no mirar
II
Pernoctan los deseos en el aire
habidos de inconscientes malabares
reducen las ansias que dormidas
caminan vagando sobre tu piel
El almíbar de esa paciencia divina
atrae mi olfato y a mi boca también
Los besos que no han nacido
que más de una vez yo quise ver
puede que en este tiempo en que dormito
de a montones salir y florecer
I
Las ninfas que conocen mis secretos
que se alejan cuando mas las necesito
recrudecen el sonido que no escucho
y persisten en acortar las distancias
La música repetida a mis oídos
se convierte en canciones de cuna
Se añora como el pasado de otrora
y se piensa como el presente sagrado
Cuando aquietas la intempestuosidad
que genera el miedo que te adorna
si me asomas un poco la verdad
de seguro descansarás en la horma
IV
Entrego mis secretos guardados
Te heredo mis pertenencias
Puedes convertir lo soñado
a tu dulce y plena conveniencia.