Alabado sea Jesucristo…
“El que quiera seguirme, que se niegue a sí mismo, cargue con su cruz cada día y se venga conmigo. Pues el que quiera salvar su vida la perderá; pero el que pierda su vida por mi causa la salvará. ¿De qué le sirve a uno ganar el mundo entero si se pierde o se perjudica a sí mismo?”
Señor, concédeme la gracia de aceptar la entrega que me pides cada día. No quiero ser esclavo de la comodidad y de la vanidad. Libérame Señor, para que pueda unirme a Ti en las asperezas de cada día y no pretenda una vida sin límites o sin dificultades.
Sagrado Corazón de Jesús:Gracias por regalarme un día mas para servirte y amarte. Casimiro López.