Alabado sea Jesucristo…
Señor
Jesús, Tu eres nuestra paz, mira nuestra ciudad dañada por la violencia
y dispersa por el miedo y la inseguridad. Consuela el dolor de quienes
sufren, da acierto a las decisiones de quienes nos gobiernan. Toca el
corazón de quienes olvidan que somos hermanos y provocan sufrimiento y
angustia. Protege a las familias, a nuestros pueblos y comunidades. Que
como discípulos misioneros tuyos, sepamos ser promotores de justicia y
de paz, para que en ti, nuestro pueblo tenga vida digna. María, Reina de
la Paz, ruega por nosotros. Amén
Arzobispado de Córdoba-Argentina
Sagrado
Corazón de Jesús. Mil gracias por concederme un día más
para adorarte y servirte. Hagamos como decía San Agustín:
Señor a Ti solo busco, a Ti solo amo y tuyo quiero ser. Mi
único deseo es conocerte y amarte. (Sol 1,1,). La mies es
mucha y pocos son los obreros para recogerla. Es la Palabra
de Dios. Alabado sea Jesucristo. Amén. Yo siembro cada día
Pequeñas Semillitas, con el vehemente deseo de que se propague
la Fe, en el Sagrado Corazón de Jesús y suplico a todos
los creyentes y no creyenes, que pidan al Señor Jesucristo en
oración, que no haya más guerras ni hambre en el Mundo y
reine la Paz en todos los rincones del Orbe. Así sea.
Detente, el Sagrado Corazón de Jesús está conmigo. Casimiro
López