Eres muy linda y hermosa, te crías en un fangal, pero siempre estás preciosa.
Tus pies están en el limo de las aguas estancadas, pero lucen tan hermosos como si fueras un hada.
Tus hojas tienen en su interior unas burbujitas blancas que te sostienen como en brazos de una madre buena y santa.
Tus pétalos son de rosa, tus estambres y pistilos son como tu corola. Todo es muy triste en tu estar, debes de sentirte sola.
Tú te mueves con el viento, que también levanta olas, ese movimiento lento es el de las caracolas, que navegan en tus aguas, buscando sustento en dulces odas.
Hoy quiero rendirte a ti, un homenaje con honra, para que sepas de mí, como si fuera tu sombra, Eres la flor más bonita de todos los lodazales, si bien tú eres tan linda y pulcra como las aguas pluviales.
Hoy te brindo este relato como si fueras mi novia para decirte, flor del loto, eres como la amapola de color rojo brillante. Yo quiero libarte a solas para sacar de tu cuerpo el almíbar que me donas.
Ya me despido de ti, también de tu primavera. ¡¡Te guardo en mi corazón para quererte de veras.!!
Casimiro López Cano