Alabado sea
Jesucristo…
Si Jesús, que es Dios, tuvo también sus fracasos en el
apostolado, ¿queremos nosotros ser más que Él? ¿Pensamos, acaso, que seremos
más solícitos y vigilantes con las almas, de lo que lo fue el Señor?
Si Jesús tuvo que decir que algunas ciudades, a pesar de
todos los milagros que habían visto de Él, estaban en peor estado que al
principio, también nosotros debemos contar con el posible fracaso, que no será
culpa nuestra, sino de los demás, que están como endurecidos por el demonio.
Pero también puede suceder que el fracaso en el
apostolado venga por culpa nuestra, por pereza y descuido en preparar la
misión, o negligencia y falta de preparación, etc. También aquí deberemos pedir
perdón a Dios, y confiar en su misericordia, dándonos golpes de pecho, pero
tratar de reparar con oración y sacrificios.
Y recordemos siempre que las apariencias engañan, y lo
que hoy puede parecer un éxito rotundo en el apostolado, luego se desvanece
porque las almas no perseveran. En realidad sólo estaremos seguros del éxito o
fracaso en nuestro apostolado, cuando estemos en el Cielo, y veamos las almas
que se han salvado y las que se han condenado.
www.apostoladocatolico.com.ar
Sagrado
Corazón de Jesús. Mil gracias por concederme un
día más para adorarte y servirte. Hagamos como
decía San Agustín: Señor a Ti solo busco, a Ti
solo amo y tuyo quiero ser. Mi único deseo es conocerte
y amarte. (Sol 1,1,). La mies es mucha y pocos son los
obreros para recogerla. Es la Palabra de Dios.
Alabado sea Jesucristo. Amén. Yo dibulgo
cada día Pequeñas Semillitas, con el vehemente deseo de
que se propague la Fe, en el Sagrado Corazón de
Jesús y suplico a todos los creyentes y no creyentes, que pidan al Señor Jesucristo en oración, que no haya más guerras ni hambre en el Mundo, ni atentados terroristas ó políticos de guante blanco, y reine la Paz, así como el Amor,
en todos los rincones del Orbe. Así sea. Detente,
el Sagrado Corazón de Jesús, está conmigo. Casimiro
López