Alabado sea
Jesucristo…
“Ven
Señor Jesús,
porque las bambalinas de éste mundo son
solo brillos pasajeros y nosotros necesitamos de la Luz de tu Infinito
Amor que perdura eternamente. Sólo Tú Señor llenas nuestras
vidas de paz, sólo contigo podemos seguir adelante, tanto en la
tormenta como en la calma. Nosotros nos abandonamos en tu Amor y en Ti esperamos
Señor. Amén”
¡Buenos días!
En tiempo de vacaciones
A veces al
regresar de vacaciones y hacer un balance de esos días, no quedas satisfecho,
¿verdad? Es sabiduría que hagas una serena evaluación y anotes algunas ideas
para mejorar el próximo año. Siempre puedes mejorar la calidad de todo lo que
haces. Evaluar es positivo para tu
formación permanente. Te presento aquí algunas ideas que tal vez te ayuden.
Haz de tus vacaciones un tiempo de gracia, de
encuentro y de amor. Dedica las vacaciones a hacer esas pequeñas cosas que
durante el año te resultan más complicadas. En especial dedica más atención a
la familia y los amigos. Da un tiempo de descanso a la querida televisión, a la
consola de jueguitos, a la compu. Ábrete a gente nueva, escuchando a personas
de otros lugares, de otras culturas, experimentando la alegría de dar y darte.
Reserva un tiempo de vacaciones a ti mismo, alejándote del ajetreo de la gente
y pensando en tu vida, proyectos, dificultades. Combina los tiempos de descanso
con otros momentos de oración, de lectura, de ayuda a los más necesitados.
Sobre todo al hacer la maleta, acuérdate de meter a Dios y, cuando llegues al
lugar elegido (o en tu propia casa), no te olvides de sacarlo.
Vuelvo a subrayar
que la reflexión sobre lo que haces y cómo lo haces, es un eficaz hábito de
superación personal que te enriquecerá con la verdadera experiencia de la vida.
¿Nos encontramos de nuevo mañana? Gracias por abrir nuestro sitio.
Padre Natalio
Sagrado
Corazón de Jesús. Mil gracias por concederme un día
más para adorarte y servirte. Hagamos como decía San
Agustín: Señor a Ti solo busco, a Ti solo amo y tuyo
quiero ser. Mi único deseo es conocerte y amarte. (Sol
1,1,). La mies es mucha y pocos son los obreros para
recogerla. Es la Palabra de Dios. Alabado sea Jesucristo.
Amén. Yo dibulgo
cada día Pequeñas Semillitas, con el vehemente deseo de
que se propague la Fe, en el Sagrado Corazón de Jesús y
suplico a todos los creyentes y no creyenes, que pidan al
Señor Jesucristo en oración, que no haya más guerras ni
hambre en el Mundo y reine la Paz en todos los rincones
del Orbe. Así sea. Detente, el Sagrado Corazón de Jesús
está conmigo. Casimiro López