UNA SOLA PIEL
Dos cuerpos q se desean,
anhelan unirse en una sola piel.
Cuerpos ardientes,
sangre q fluye por sus venas,
como ríos ardientes de lava,
derritiendo sus células
por la pasión y el deseo.
Pasión y deseo de dos cuerpos,
fuego q arde en sus puntos bajos,
como brazas al rojo vivo.
Cuerpos ardientes,
q solo buscan compartirse, fundirse,
en su fuego interno,
derretirse y formar una sola piel,
hasta explotar cual gran erupción,
derramando su ardiente lava en su interior.
Juan Cano
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