APASIONADAMENTE
Ansias tengo, vida mía,
de contemplar tu sonrisa
cuando te encuentres conmigo;
de besar tus lindos labios,
acariciándote el alma,
disfrutando de tus besos
y de tu cálido aliento.
De estrecharte tiernamente,
para sentir la tibieza
de tu cuerpo junto al mío,
y envolverte con mis brazos
para evitar que te alejes.
De entrelazar nuestras manos
y decirte muchas cosas
dulces, al oído, en versos,
que para ti sólo he escrito,
y así comprendas que te amo
y nunca, nunca te olvido.
Deseos de pertenecerte,
de ser de ti algo muy íntimo;
de tranformar mis palabras
en eróticos murmullos;
de despertar tus sentidos
contagiándote mis ansias,
cubriendo de ardientes besos
toda tu blanca epidermis;
de extasiarme con la esencia
que desprende tu piel cálida;
de deslizar mis caricias
hacia tus íntimas partes;
de contagiarte mi fiebre
de deseos contenidos
¡y abrasarte con el fuego
de ésta, mi pasión volcánica!