Hizo su nido el deseo
en tu pupila y la mía,
dibujando nuestras cuencas
la pasión en pinceladas,
sobre tus huesos y los míos
solo carne esperanzada,
al juntarse teje abrigo
y no hay más espacio frío
Entre tu corazón y el mío
dos latidos que se juntan
calientan tu sangre y la mía
fermentando bebida de dioses
que en tu lengua y en la mía
Se liban en puro goce.
Y lo pienso…y me digo:
!somos pura sincronia!
Entre tu mano y mi mano
Hay un espacio vacío
La ansiedad acude al mío
Me toma y me desespera
Y nos volvemos quimera…