(9 Octubre 2014 - ESA) La misión internacional Cassini ha descubierto
una enorme nube tóxica sobre el polo sur de la mayor luna de Saturno,
Titán, formada tras un dramático enfriamiento de su atmósfera debido a
un cambio estacional. Gracias a los datos recogidos por esta misión, los
científicos han podido determinar que este gran vórtice polar contiene
partículas congeladas de un compuesto tóxico conocido como ácido
cianhídrico o cianuro de hidrógeno (HCN).
Imagen: Un mapa de Titán, obtenida con la Cassini Mapeo Visual
e Infrarrojo Espectrómetro (VIMS). El inserto muestra una vista en
color natural del vórtice del polo sur, una enorme nube con forma de
remolino que se observó por primera vez en 2012. Tres componentes son
evidentes en el mapa VIMS, y se muestran en diferentes colores de
acuerdo a las diferentes características de su luz. Estos son la
superficie de Titán (que se muestra en naranja), la neblina atmosférica a
lo largo de la extremidad (verde) y el vórtice polar (azul). El vórtice
del polo sur muestra una diferencia notable con respecto a otras
porciones de la atmósfera de Titán: la firma de moléculas de cianuro de
hidrógeno (HCN) congelados. Este descubrimiento sugiere que la atmósfera
del hemisferio sur de Titán se enfría mucho más rápido de lo esperado.
Crédito: Remco de Kok Cassini/VIMS. (Haga click en la imagen para
agrandar. Se abre en otra ventana.) Crédito: NASA.
“Este hallazgo indica que la atmósfera del hemisferio sur de Titán se
está enfriando mucho más rápido de lo que cabría esperar”, explica Remco
de Kok, del Observatorio de Leiden y del Instituto Neerlandés de
Investigación Espacial, SRON, autor principal del estudio publicado en
Nature.
Al contrario que el resto de lunas de nuestro Sistema Solar, Titán está
envuelto en una densa atmósfera compuesta fundamentalmente de nitrógeno,
con pequeñas cantidades de metano y de otros gases traza. Titán se
encuentra diez veces más lejos del Sol que la Tierra, y sus bajas
temperaturas provocan una ‘lluvia’ de metano y de otros hidrocarburos
que fluyen en su superficie formando ríos y lagos.
En Titán también hay estaciones a lo largo de los 29 años que tarda en
completar una vuelta alrededor del Sol junto a Saturno. Cada una de sus
cuatro estaciones dura unos siete años terrestres, y el último cambio
estacional tuvo lugar en 2009, cuando el hemisferio sur pasó de verano a
otoño.
En mayo de 2012 las imágenes de la sonda Cassini desvelaron un inmenso
torbellino de varios cientos de kilómetros de diámetro que se estaba
empezando a formar sobre el polo sur.
Cambio de estaciones en Titán
La formación de este gran vórtice polar parece estar asociada con el
cambio de estación, cuando grandes masas de gas calentadas por la luz
solar durante la primavera septentrional se desplazan hacia el
hemisferio sur.
Un dato desconcertante sobre este remolino es su gran altitud: se
encuentra a unos 300 kilómetros sobre la superficie de Titán, donde los
científicos pensaban que haría demasiado calor para que se formasen este
tipo de nubes.
“Sinceramente, no esperábamos encontrar una nube tan grande a semejante altitud”, confiesa Remco.
Ansiosos por comprender por qué se había formado esta nube tan
misteriosa, los científicos empezaron a analizar el vasto archivo de
datos de la misión Cassini. Tras un minucioso escrutinio, encontraron
una pista fundamental en el espectro de la luz solar reflejada por la
atmósfera de Titán.
Un espectro separa la luz reflejada por un cuerpo celeste en sus colores
constitutivos, desvelando las huellas de los elementos y las moléculas
presentes. El Espectrómetro en las bandas de la luz Visible e Infrarroja
de Cassini (VIMS) toma este tipo de medidas en distintos puntos de la
geografía de Titán, cartografiando la distribución de compuestos
químicos en la atmósfera y en la superficie de esta gran luna.
“La luz procedente del vórtice polar mostraba un rasgo completamente
diferente a la de otras regiones de la atmósfera de Titán”, explica
Remco de Kok. “Aquí se podía ver claramente la huella de moléculas
congeladas de ácido cianhídrico”.
Nota: Se transcribe este
estudio-informe con el sólo y único fin de crecer en conocimientos muy
especiales, acerca de la luna mayor de Saturno, llamada Titán en la que
la Sonda Cassini que estudia la atmósfera, y descubierto una nube
tóxica de Cianuro en el polo sur de la misma por el expectómetro, en las
bandas de la luz Visible e Infrarroja de Cassini (VIMS) que toma este
tipo de medidas en los distintos puntos de la geofrafía de la gran luna
de Titán, cartografiándo la distribución de los compuestos quimícos en
la atmósfera y en la superficie de esta gran luna. Es interesante leer
este informe, para darse cuenta de los grandes misterios que encierra
nuestro Sistema Solar. Casimiro López.