Un diminuto coleóptero sobrevolaba el techo
se detuvo en una esquina de mi almohada
.... centenares de ojos nos miraban.....
Todo el divino desorden de aquella cama!
Toda aquella suavidad de tulipanes
Sábanas rosadas borrachas de fluidos
Tu... encima de mi, sudorosa, enloquecida
tratando tiernamente
de comerte el mundo en una mordida
Un minutero cabalgaba sobre miles de latidos
El insecto voló en fracciones de segundo
Tu y yo nos impregnamos de un solo orgásmo
y volvimos a morir de niebla