Me
persigues impetuoso
por los
largos laberintos de mi lecho
y me
haces sucumbir muy lento
a la
invisible alquimia del embrujo de los besos
que me
aguardan en la hoguera de tu cuerpo.
La
locura de tu fuego me alucina
cuando
escribes en mi piel cuentos secretos
jugando
a ganarlo todo o a perderlo
cada
vez que me tocas y me enredas
en el
hilo de tu ardiente fantasía.
Y
nuestro Amor como una etérea mariposa
va
emergiendo de un capullo misterioso
como un
pájaro invisible que atraviesa el tiempo
como un
rayito de luz y de pasión
que
ilumina la neblina de mis sueños.
Yo me
siento, cuando me amas, como reina
de tus
noches de pirata , de rey y de poeta
el más
fiel de los infieles a quien quiero
y en
mitad de tus tormentas,
se que
puedo atrapar el viento...Bogar por la vida
y
regresar una vez más hasta tu puerto.
Ana
Luisa Arellano