Alabado sea
Jesucristo…
Un cierto día, la profesora pregunto a los niños si
alguien puede explicar quién era Dios… Uno de los niños levantó el brazo y
dijo: “Dios es nuestro padre, el hizo la tierra, el mar y todo lo que existe en
Él. Él nos hizo sus hijos”.
La profesora queriendo buscar más respuestas, fue más
lejos. “¿Cómo ustedes saben si Dios existe, si nunca lo vieron?” La sala se
quedó en silencio. Pedro, un niño muy tímido, levanto la mano y dijo: “Mi mamá
me dijo que Dios es como el azúcar en mi leche, que ella prepara todas las
mañanas, yo no veo el azúcar que está mezclado con mi leche, pero si ella es
quitada, mi leche quedará sin sabor”.
Dios existe, y está siempre en medio de nosotros, solo
que no lo vemos, pero si Él se aparta de nosotros, nuestra vida se queda… sin
sabor!
La profesora sonrió y le dijo: “Muy bien Pedro, yo les he
enseñado muchas cosas a ustedes, pero tú me has enseñado algo más profundo de
todo lo que yo ya sabía. Yo ahora sé que Dios es nuestro azúcar y que esta
todos los días endulzando nuestras vidas”. Ella le dio un beso, y salió
sorprendía con la respuesta de aquel niño.
La sabiduría no está en el conocimiento, pero si en la
vivencia de Dios en nuestras vidas. Teorías existen muchas, pero la dulzura
como la de Dios no existe, ni en las mejores azucares. Tenga un buen Día y no
se olvide colocar azúcar en su vida…
¡Buenos días!
Destello
“Si puedes ser
una estrella en el cielo, sé una estrella en el cielo. Si no puedes ser una
estrella en el cielo, sé una hoguera en la montaña. Si no puedes ser una
hoguera en la montaña, sé una lámpara en tu casa”. El Señor te ha regalado la
luz de la fe para iluminar a tu alrededor, con el ejemplo y con la palabra.
“Si irradias tu fe, si gritas tu verdad, si
liberas las voces que atestiguan libertad, si expandes tu luz, si expresas
claridad, no habrá tinieblas, no habrá oscuridad, serás destello de Dios que a
otros guiará” (Canción).
Cuando das un buen
ejemplo o dices una buena palabra, algo comienza a pasar. Es como tirar una
piedra en un lago tranquilo. Pequeñas ondas van generando círculos concéntricos
hasta morir en las playas. Conviene que lo pienses para animarte a irradiar tu
propia luz. Tendrás el mérito de haber alentado a otros por el camino correcto.
Enviado por el P. Natalio
Sagrado
Corazón de Jesús. Mil gracias por concederme un día más para
adorarte y servirte. Hagamos como decía San Agustín: Señor a tí
sólo busco, a tí sólo amo y tuyo quiero ser. Mi único deseo es
conocerte y amarte. (Sol 1,1). La mies es mucha y pocos son los
obreros para recogerla. El Señor dijo: Vengan a mí los que están
cansados y agobiados, que yo los consolaré (Mt 11.28). Es la
palabra de Dios. Alabado sea Jesuscristo. Amén. Yo dibulgo cada día
Pequeñas Semillitas, con el vehemente deseo de que se propague la
Fe, en el Sagrado Corazón de Jesús y suplico a todos los creyentes y
no creyentes , que pidan al Señor Jesuscristo en oración, que no
haya más guerras ni hambre en el mundo, ni atentados terroristas,
ni políticos de guante blanco y reine la Paz, así cómo el amor, en
todos los rincones del Orbe. Así sea. Detente, el Sagrado Corazón
de Jesús, está conmigo. Casimiro López