Una vida puede albergar la serenidad y el tumulto, la infelicidad y el contento, la frialdad y la calidez, la posesión y la dádiva, y también una conciencia del propio éxito que ronda la petulancia.
La mayoría de las vidas son una serie de altibajos y muchas de ellas los estrechos confines de ideales que han llegado por encima de las expectativas. Marco siempre la diferencia entre los pensamientos que van mucho más allá del Universo y de aquellos que me emocionan. Y emocionalmente o poética mente me parece inmensamente más excitante y más hermoso lo real que el hecho de dedicar todo el ingenio que uno posee a inventar cuento de hadas.
En este momento me siento feliz por lo poco que tengo, sé que me falta mucho para lograr el júbilo extremo pero mis ojos son capaces de ver el espacio que me separa de todo lo que ansío. Me gusta pasear por la hierba, caminar descalza por la playa, saber del dulzor de una noche de verano y el sitio dónde están amarrados los remos de los botes del amor.
Es allí cuando acepto la verdad.
Que pases un Feliz fin de semana y que el inicio de semana tenga las escaleras que te lleve a la armonía placentera del Alma.