APRENDE Y AVANZA
Un divorcio o una separación no significan que una relación haya sido un fracaso, si todo lo vivido te sirvió para aprender y mejorar.
Hay personas que por uno u otro motivo pasan por dos o tres relaciones y cada una de ellas les sirve para crecer y pulirse.
Son como esas cerámicas que vuelven al horno para tomar forma o fijar un color. Duele, pero ese dolor purifica.
No faltan, claro está, los que se repiten en relaciones enfermizas, porque no aprenden y siguen en el sopor de la inconsciencia.
Por lo mismo, examina tu pasado sin culparte y sin acusar a otros, saca tus enseñanzas y sigue con la frente en alto y el corazón en paz.
No te tortures con reproches continuos ni te abandones al sufrimiento, antes, bien quiérete y enciende luces de esperanza.
Tampoco te hagas daño cerrándote a nuevas relaciones; nadie nació destinado a rupturas permanentes.
Ya lo sabes, lo importante es aprender y avanzar. Si haces todo con verdadero amor ese divorcio o esa separación son un éxito.
A/D