A ROSA
Ella es Rosa perfecta y delicada,
de una belleza peculiar, sincera,
y se lleva la palma por donde quiera,
y por tal se merece ser amada.
A mi alma la tiene embargada
de una fragancia tal, que no quisiera
perder por nada a tan verdadera
musa, cual del Olimpo regalada.
Y soñar con eternas primaveras
y veranos de cielos estrellados
en noches de romántica hermosura,
donde las penas eludir de veras
y dejar los escollos olvidados
de esta vida que a veces es tan dura.
A Rosa H. M.
Huétor Tájar 03 de diciembre de 2011